Una Vida De Mentira

Capítulo 22

Maratón 2/2

Estas segura de todo lo que acabas de contarme, no hay ningún error, quizás hay una posibilidad que estén equivocados y si ellos te están engañando, eso no puede ser cierto.

—Hay pruebas Draco.

—Tú le crees.

—Si, estoy muy segura.

Esto jamás me hubiera imaginado, siempre creí que eras hija de Bellatrix y
Rodolphus, pero todo este tiempo eras una Weasley. —Draco se sentó a la orilla de la cama.

Hay algo de malo que sea una Weasley, sigo siendo la misma, solo que ahora estoy con mis verdaderos padres.

No tiene nada de malo, solo que estoy sorprendido, como te dijo jamás hubiera pensado en algo así, me parece todo una mala broma.

No es una mala broma, pero ahora me entiendes, estuve toda esta semana asimilando toda la verdad, sólo pensé en mi y en como me sentía.

—Draco necesito hablar con tu madre.

Llegará en la noche, Astoria se quedó con ella ayudándola en todo lo que necesite, porque quieres hablar con ella.

Quiero preguntarle directamente si ella sabia la verdad, si sabía quién era en realidad yo.

Como puedes pensar eso de mi madre, ella no seria capaz de guardar una información tan delicada.

—No lose Draco, pero necesito preguntarle, no puedo quedarme con la...

Esto sí no te lo permito, no trates de hablar mal de mi madre Gines o mejor dicho Ginny, mi padre antes de morir te dejó una carta.

Draco se levantó de la cama, y dejó la carta encima del cajón. — Si Bellatrix y Rodolphus te engañaron toda tu vida, no significa que mi madre sea cómplice de algo tan cruel.

Draco salió de la habitación, cerró la puerta muy fuerte, por casi y se cae la lámpara que había encima de la mesa.

Toda esta situación me está haciendo dudar de todos, quizás Draco tiene razón, su madre no sería capaz de ocultar una situación así, Narcissa no es así aunque Bellatrix es su hermana y haría cualquier cosa por ella.

Unos pequeños golpes en la puerta la asustaron.

—Puedo pasar.

Sonreí al escuchar su voz.

—Adelante Harry.

Abrió la puerta, se quedó parado observandome con una sonrisa. — Todo está bien.

—Nada esta bien. — Concluyó.

Pasó algo con Malfoy, se fue de aquí con una mirada muy molesta, te ha hecho algo. — Harry cambió de gesto, se puso serio al mencionar a Draco.

Todo está mal con él, yo tenía que estar en España, su padre estaba enfermó, toda esta situación sobre mi verdadera identidad, me ha tenido muy ocupada  y ahora su padre está muerto.

—¿Lucius Malfoy, está muerto?.

Así es, él al igual que mis supuestos padres también me ignoraba, de cierta manera su muerte no me conmueve pero Draco y su madre están sufriendo y a ellos si les tengo cariño.

—A Narcissa y a Draco. — Harry no creía lo que Ginny le decía.

Ellos siempre se han portado bien conmigo, cuando era pequeña él fue mi único amigo y Narcissa es la figura materna que más cerca he tenido, no me dio cariño pero un poco de atención sí.

—Tu no tienes la culpa que el padre de Malfoy muriera.

—Lose y Draco también lo sabe.

Entonces porque el fue molesto de acá, acaso no te entendió por todo lo que has pasado, Ginny si el no quiere estar contigo ahora que sabes que eres una Weasley, con todos nosotros es suficiente.

No nada de eso, el también se sorprendió pero no tiene nada que ver con que sea una Weasley, se molestó porque quería hablar con su madre y preguntarle si ella sabía la verdad y en todo éste tiempo me lo ocultó.

Es normal que desconfíes de todos ellos, supuestamente eran tu familia pero me alegro con saber que no es así, y si quieres puedo acompañarte y asi le preguntas, no te puedes quedar con esa duda.

Muchas gracias Harry, en uno de estos días iré, ahora no porque se que esta sufriendo por la muerte de su esposo.

Harry no quería irse de su lado, necesitaba conversar de cualquier cosa con ella, todo sea por estar junto a Ginny.

—Está bonito tu habitación.

—¿Te gusta la decoración?.

Harry no dejaba de mirar a Ginny. — Si, estás hermosa.

Ginny al instante volteó, no quería que Harry la mirara con sus mejillas rojas.

Hermione me ayudó a decorar junto con la señora Molly y Fleur.

La habitación quedó en silencio de nuevo, Ginny estuvo pensando toda la noche si debía o no decirle a Harry sobre él, pero que le detenía, absolutamente nada, el jamás se importó por ella al contrario malogró su vida, tengo que hacer lo correcto.

—Harry tengo que contarte algo.

Camino hasta la esquina de su cama y se sentó, Harry tambien caminó y se posicionó al frente de ella.

—Dime, hay algo pueda hacer por tí.

Antes de irme a España, alguien apareció en mi habitación del hotel donde estaba hospedada.

—¿Quién?. — Harry le observaba con el ceño fruncido.

—Rodolphos Lestrange.

Y como si alguien le hubiera lanzado un
Petrificus Totalus, Harry no se movía por la noticia que Ginny le dio.

—¿Que te dijo?. — Preguntó.

—Nada en particular.

—¿Cómo que nada?. Un mortifago se acercó a ti y no te digo nada. — Harry alzó su voz.

Harry Potter no te permito que me levantes la voz, si no te calmas no te diré nada.

—Esta bien, bajaré la voz.

Solo se acercó para pedirme dinero, y también me contó que hay un pequeño grupo de mortifagos que piensan atacar el ministerio.

—Te dijo cuando lo iba hacer.

No,por supuesto que no, es más siento que eso se le escapó no quiso decirlo pero se le pasó al hablarlo.

Tengo que comunicar al ministerio, tienen que resguardar la seguridad, poner más hechizos, lo que sea pero deben vigilar más. — Harry se estaba dirigiendo a salida cuando Ginny volvió hablar.

Harry espera, ellos te preguntaran de dónde sacaste esa información, me vendrán a interrogar y quizás puedan creer que soy su cómplice.

Ginny tenía razón, lo que menos quería Harry era que ella pasara por otra situación similar, todavía recuerda que la primera vez que la conoció la arrestó.

Tenemos que hacer un plan para que tú no seas afectada, lo que menos quiero es que te involucren con Lestrange.

Ginny se acercó a unos de sus cajones, buscaba ese objeto, ella sabía que lo había dejado por algún lugar, descomodaba un poco su ropa hasta que segundos después lo encontró.

Se aproximó a donde estaba Harry y le enseño el pequeño espejo doble.

—El me dio esto para que pueda estar en contacto conmigo para pedirme dinero.

Harry se sorprendió al verlo, Ginny te das cuenta que con eso lo podemos atrapar, al fin podrá pagar por todo el daño que ha ocasionado.

Ella asintió, ya inició la traición a la persona que por muchos años le había llamado padre....