"SECRETO" (Tom Riddle y tú +18)

El consejo.

-¿Te gusta?- me pregunta seriamente Draco mientras bebe de su copa de vino. Me giro para mirarlo y él tiene los ojos en Tom, quien bebe junto a su padre y sus amigos.

-No.- respondo firmemente. El me mira y alza una ceja en señal de incredulidad. -¿Ah si?- me pregunta -No te creo.- afirma.

-No necesito que lo hagas.- rodeó los ojos y me giro para irme pero el me sujeta de el brazo. -Espéra.- me detiene y me giro para verle. -Lo lamentó.- se disculpa.

-No vuelvas a sacar conclusiones respecto a mis sentimientos o acciones.- le advierto.
-Lo se, lamentó si fui inapropiado.- se disculpa de nuevo. Asiento con la cabeza y detrás de Draco aparece el otro chico, Mattheo.

-Buenas noches, Dama y caballero.- alardea.

-¿Que tal su noche?- pregunta. Antes de que pueda contestar Draco me interrumpe. -Bien, pero estaría mejor sin ustedes, tú y tu hermano. Aquí.-

-ah, Malfoy.- suspira. -Tan gentil como siempre con tus palabras.-

-¿Te crees? Podría ser gentil con el puño que te daré en la cara si no te largas.- le amenazo y por un momento creí que Mattheo respondería de igual manera. Pero en cambio, se burló.

-Malfoy, Malfoy, Malfoy. Ah, para que me molesto en pelear contigo, sabemos que puedo hacer que supliques de rodillas ante mi.- él le menciona, estoy algo confundida.

-¿De que me perdí?- los interrumpo.

Mattheo me mira y sonríe -Nada preciosa, ¿Quieres bailar?- me invita. Nose si aceptar o no así que dirijo mi vista a Draco, quien está detrás, su mirada está tan molesta y nose si aceptar pero él asiente sutil. Así que yo acepto.

Mattheo me lleva al centro de la pista y comenzamos a bailar una canción bastante linda y clásica. El sonido de violines de fondo, es maravilloso.

-Señorita Black. No hemos tenido el gusto de conocernos de la manera correcta.- me menciona mientras bailamos.

-Lo se, culpó a su hermano, señor.- admito. Él sonríe -Ay Thomas, nunca aprende.-

-Es algo molesto.- admito.

-Dígamelo a mi, señorita. Lo he soportado toda mi vida y es un amargado de mierda.-

Mojo mis labios -Te creo.-

-Lo siento por ti, por que le gustas.- el se burla.

-¿Que?, ¿De qué hablas?- finjo no entender.

-Señorita Black, ambos sabemos de lo que hablo.-

-No de hecho, no tengo idea.-

El se acerca a mi rostro y me mira a los ojos, luego dirige sus labios cerca de mi mejilla subiendo por ella llegando a mi oído. -¿Te recuerdo lo que sucedió durante la cena debajo de la mesa? No creo que tan pronto lo haya olvidado ¿o si?- me susurra.

Siento mi rostro calentándose de vergüenza ante sus palabras, él vuelve a mi rostro y me observa, le parecen divertidas mis expresiones ya que se burla.

-¿Que sucede? ¿Te lo recuerdo en voz alta?-

Niego con la cabeza y bajo la mirada avergonzada.

-No tienes por qué avergonzarte, solo me di cuenta pero no te preocupes. No me interesa en lo más mínimo que hayan hecho o no.- admite.

-Ehhh... y-yo...- las palabras se atoran en mi garganta.

-Te daré un consejo, Black.- me dijo. -Créeme, no quieres ir por ese camino y se que olvidarás mis palabras pero. Tom, mi querido hermano no es una persona agradable y al parecer tú si. Pero por lo que me contó, lo desafiaste. Te ha tomado como un reto, un reto y una meta que no parara hasta conseguir. Se ha propuesto tenerte y así lo hará.- afirmó.

-No, yo...- interrumpí.

-Déjame terminar.- me detuvo y continuó. - Lo hará si se lo permites, y si lo haces. Es probable que te destruya en el camino.- Terminó de decir.

-No entiendo a qué te refieres.- negué con la cabeza. El me miro y sonrió. -Tan inocente, quizá eso le atrajo aún más. No importa que no hayas comprendido, solo no olvides cada una de mis palabras, Black.-

Lo mire extrañada pero continuamos bailando un poco más hasta que la música acabo. Me llevo de nuevo con Draco y se fue. Dejándome con un mar de dudas en mi cabeza.

-¿Te molesto?- me pregunta Draco refiriéndose a Mattheo. -No.-

-Bien, me alegro. ¿Quieres ir a dormir ya?- estaba cansada y el reloj casi daba las 12. Lo pensé por un momento. -Será mejor que duermas, de aquí en adelante solo es baile y platicas de los adultos.- me sugirió y acepte.

El me llevo de el brazo de nuevo a mi habitación después de despedir a su madre y a algunos amigos, incluidos Pansy, Nott y otros. He perdido de vista a Tom y a Mattheo. Afortunadamente no tengo que despedirlos también.

Finalmente llegó a mi habitación y el me despide afuera de esta. Entro cerrando la puerta, la habitación está obscura.

Es extraño, no recuerdo haber dejado la luz apagada. Tal vez Draco la apago al salir. Me dirijo al interruptor pero antes de llegar a el, la luz se enciende. Y él aparece detrás de mi.

-Buenas noches, Black.-