07. Las fotos no reflejan todo.

Comenzar desde el principio
                                    

También acomodó su celular de tal manera que podía verlo mientras se acomodaba en su cama de lado, suspiró y se me quedó mirando, reímos al mismo tiempo por el silencio que se había hecho y me escondí bajo las mantas.

― ¿Qué haces? ― Dice entre risas.

― No me mires.

― ¿Por? Si sos re linda ― Murmuró lo último y me pusé más roja todavía, por suerte no podía verme, debe haber pensado que no lo escuché.

― Bueno, ahora si callate que quiero dormir ― Vuelvo a aparecer frente a la cámara cerrando los ojos y suspirando, me agarraba el sueño de a poco, abrí un solo ojo para mirarlo por la pantalla ― Hasta dentro de un ratito.

Sonrió con los ojos cerrados, ― Hasta dentro de un ratito.

Y así nos dormimos, estaba al lado de mi casa pero por esa llamada, lo sentí muchísimo más cerca.

Cuando me desperté, sorprendentemente estaba en la misma posición, ya que soy super inquieta para dormir, pero me decepcionó el hecho de que Mateo había cortado la llamada, seguro cuando se despertó. Entonces decidí levantarme y hacerme un té, por fin había dejado de llover.

Cuando estaba por darle el primer sorbo a mi taza, escuché el timbre, rodé los ojos para ir a mirar con mi mayor cara de culo a la persona que había interrumpido mi merienda de las tres de la tarde.

Al abrir la puerta me encontré al morocho del otro lado de la reja ― Pasa ― Me corrí a un lado para que pase adentro de mi casa, tenía puesta una campera negra rompeviento la cual yo también usaría con el frío que se hizo ahora el clima.

―  Hola Cielo ¿Dormiste bien ahora?

Sonreí apenas ― Si, mejor.

Me devolvió el gesto ― Me alegro entonces ― Se quedó unos segundos en silencio y después miró hacia el living, más específicamente a la mesa ratona de este, donde estaba mi cámara ― ¿Te gusta la fotografía? ― Dice mirándome y asiento yendo a buscar uno de mis más preciados tesoros.

― Sip, el barrio es lindo para sacar fotos ― Digo observando un poco la cámara, Mateo me mira y sonríe.

Agarra lo que yo tenía en las manos y se saca su campera, va por mis llaves ― ¿Qué haces?

― Te voy a mostrar lo que te estás perdiendo, vamos ― Dice para poner su campera en mis hombros, tenía su perfume, e intentar llevarme afuera pero me freno.

― Banca que me voy a cambiar y vengo ― Le sonrío devolviendole su campera para correr a mi cuarto para sacarme el piyama y ponerme un Jean una remera cualquiera y un buzo, mientras volvía me ponía las zapatillas, ― Vamos.

Le saco la cámara de las manos rápidamente, la había prendido asique le saqué una foto, se rió. ― Vamos.

Había mucho por ver y para poder sacar buenas fotos, el primer lugar que vimos fueron varios grafittis, bastantes bien hechos, no estaban pintados así nomás, tenían su dedicación.

Nos frenamos ahí un rato, a veces Mateo posaba de manera graciosa para hacerme reír y así estábamos un rato largo, después pasamos por unos conventillos, pintados de distintos color, los contrastes entre estos me encantaron, a pesar de que estaba totalmente nublado y oscuro el cielo, lo colorido del lugar le daba su toque de alegría.

Después pasamos por una parte más turística, donde había ferias y restaurantes, no había mucha gente por el clima pero igual había curiosos como yo sacando fotos o simplemente admirando todo.

― Acá siempre viene una pareja a bailar tango, un día te voy a traer a verlos ― Pasa su brazo por mis hombros mientras me señala el lugar al lado de un restaurante ― Son una pareja de casados, se conocieron acá y para que ese amor no muera siempre vienen.

lover of mine ; Trueno [Terminada✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora