𝐏𝐋𝐀𝐘𝐄𝐑 𝟎𝟎𝟎 ▬ᵃˡⁱ ᵃᵇᵈᵘˡ

º𝟎𝟎𝟖º

(Ojo: aquí no va a pasar el accidente)

—"También tengo algo pendiente que hacer, Ali, ¿que quieres?" —le responde la joven italiana.

—"Solo compañía, nada más, le diré cuando venga" —espetó el moreno.

—"Está bien, voy para allá"

Ella cierra su teléfono y lo guarda.

—¿Vas a salir, hija? —le pregunta su abuelo quien la ve que estaba guardando algo. El señor no sabe que es su arma lo que estaba guardando.

—Si, tengo cosas por hacer.

Se despide de él con un beso en su mejilla.

Ella sale de la casa, después de cerrar la puerta, nota algo entre las macetas.

Se acerca y ve que es una tarjeta similar a la que el tipo de las cachetadas le dio cuando estaba jugando Ddakji.

—¿Pero qué...? —tomó la tarjeta.

Pero había una diferencia:

"no tenía número telefónico"

"Tenía una dirección, y respiró aliviada porque estaba en su idioma"

—Tendré que pensar si volver o no, aunque... salimos y no creo que nadie se arriesgue a volver.

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Ella antes de que se uniera a los juegos, ya había averiguado la dirección de su casa, por eso es que no le había pedido la dirección por teléfono, ella sabía donde vivía.

Ella se encuentra caminando por el vecindario en el que vive el jugador 199.

—Estoy aquí ¿Qué me quieres decir? —le pregunta la castaña quien había llegado a su casa en donde acordaron.

—Tengo que cobrarle dinero a una persona, me debe dinero. ¿Me podría acompañar? —Ali le propone.

—Bien. —responde. —También tengo que hacer lo mismo, se como cobrarle a los que me deben. —decía ella mientras sonaba sus puños.

—La violencia no es la solución.

Ali no era de los que resolvían los problemas con violencia, prácticamente el moreno era pacifico.

Mientras que ella era lo opuesto, si no le querían pagar, después de tanto tiempo llega hasta el límite y comienza a cobrar, si no era por las buenas, por las malas sería.