Capitulo 17. El hombre que tomo el vino.

813 69 11
                                    


Era medio día en el castillo, Mariana se encontraba en el salón de bienvenida limpiando los cuadros y esculturas mas delicadas, pues ella y un par más de ellas, están más que permitidas para limpiar esos objetos tan delicados y costosos.

La gran parte de las sirvientas se encontraban distribuidas por el castillo realizando deberes, había algunas lavando la ropa de la familia a mano, otras se encontraban realizando la limpieza de siempre y otras preparando la comida de la noche.

Mariana, al ser la sirvienta mayor, se encontraba ahí debido a la remota posibilidad de que alguno de los Lores o inclusive la propia Madre Miranda hicieran una visita a su Señora.

Mariana se mantuvo realizando su trabajo hasta que escucho que alguien tocaba la puerta. Inéditamente ella se acerco a la puerta para recibir quienquiera que fuese, pues la puerta principal solo funciona para entrar, pero para salir era requerido usar la llave maestra de la propia Lady del castillo, sin embargo, ella tenía su copia, pero esto era un secreto para el resto del personal.

Normalmente, los Lores eran los únicos en hacer visitas y por supuesto la propia Madre Miranda. Cada uno tenia su forma de entrar, Madre Miranda tocaria y entraría después, siempre tan grandiosa y educada con cualquier sirviente. Luego estaba Lady Beneviento y su muñeca Angie, Lady Beneviento es reservada para hablar y es Angie quien hace el resto. Lord Moreu no hacia visitas, tal vez debido a su condición o por otras cosas.

Y finalmente, Lord Heisenberg, el entraba con sus ropas manchadas de aceite y mugre, siempre tan mal educado y propasado con las jóvenes sirvientas. Tan vulgar y asqueroso, tal vez sea por culpa de este hombre en particular que Lady Dimitrescu odiase a los hombres en general. Sea como sea, el era un Lord y se le debía dar ese respeto.

"Quién es?" – Pregunto Mariana del otro lado de la puerta.

"Soy Elena Lupu, vengo por la contratación."- Dijo la otra voz del otro lado de la puerta.

"- Dijo la otra voz del otro lado de la puerta

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.

Mariana recordó ese nombre. Ella fue la única joven que no había sido tomada por Lady Dimitrescu, y en su lugar había sido tomado por el extranjero americano.

"Claro, solo empuja." – Dijo Mariana a la chica.

Las dos puertas dobles se abrieron. Marina vio en el umbral a la joven Lupu, esta joven llevaba la ropa de pueblerina y una pequeña maleta. El rostro de esta chica se veía optimista, como si ignorase el peligro del castillo.

"Buenos tardes, soy Elena Lupu, hace unos días recibí esta carta de una amiga donde se me solicitaba servir al castillo. Vengo a tomar el trabajo." – Dijo la joven mujer a la sirvienta.

Mariana estaba sorprendida, nunca en sus varios anos de servicio al castillo vio a una joven trabajar voluntariamente al castillo. Varias décadas habían forjado la mala reputación del a Lady con los aldeanos de la villa.

La Dama y el Forajido (Erron Black x Lady Dimitrescu)Kde žijí příběhy. Začni objevovat