Honey || Drarry

El niño de Harry

Había una "maldición" pequeña que atacaba a Draco cada cierto tiempo, de lo cual culpaba abiertamente a su padre.

Su magia y humor se descontrolaba por completo al punto de que ni el mismo podía soportarse. Lucius decía que solo Draco tenía esa cosa extraña.

Lucius ocultaba que el también tenía esa desgracia encima.

Lamentablemente Harry tuvo la mala suerte de descubrir está rara maldición por si solo, y no les fue muy bien.

Con el tiempo Harry aprendió a qué hacer y que no hacer cuando la maldición extraña atacaba a su chico, gracias a Narcissa, que también sufría con el tormento de soportar a su esposo cuando la magia lo atacaba.

-Draco...- El rubio estaba acostado en su cama con muchas mantas encima cubriéndolo hasta la cabeza.

-¿Mghh?-

-¿Cómo te sientes, cariño?-

-Mgh...- Harry suspiro y se subió a la cama para poder colocarse del lado de la pared.

-Snape me dijo que te trajera unas pociones, debes tomarlas-

-No-

-Si no las tomas tu magia te hará daño- Harry acercó una cuchara con la poción a Draco pero está salio volando de sus manos -Draco...-

El rubio salió de bajo del montón de sabanas y miro a Harry con ojos llorosos. Harry sintió que su corazón iba a romperse al ver a su novio tan decaído.

-Si tomas esto te daré los dulces que trajo mamá para mí- Nuevamente se escondió bajo las sábanas. Harry dejo aquella medicina en el buró al lado de la cama y se acomodo para ponerse bajo las sábanas junto con Draco.

-¿Tienes frío?- Draco tenía los ojos cerrados con el ceño fruncido y los labios entre abiertos.

-Un poquito-

Harry paso sus nudillos por la mejilla de Draco acariciándola con delicadeza. Sonrió cuando Draco lo abrazo y enterró su nariz en su pecho.

-¿Ya tomarás la poción?- Draco nego -Bien, también te traje un jugo, tómalo-

Draco salio de las sábanas y se sentó aún cobijado esperando a que Harry le diera la bebida. La tomo y cuando la paso hizo una mueca -¡Harry!-

-Lo siento Draco, si no lo hacía así jamás la ibas a tomar-

-Eres cruel, no me amas, solo quieres verme sufrir- Harry aguanto una risa viendo cómo Draco volvía a acostarse y a cobijarse todo completo.

-Te amo-

-Mientes, si me amarás no me hubieras dado esa cosa fea-

-¿Que puedo hacer para que me creas?- hubieron unos minutos de silencio antes de que Draco hablara.

-¿Me abrazas?-

-Por supuesto que sí, cariño- Harry se subió a Draco y lo rodeo con sus brazos y piernas cubriéndolo en un abrazo cálido y suave.

-¿Y me das un beso?- Harry quitó un par de cobijas para poder ver el rostro del rubio, que se encontraba más pálido de los normal, y le dejo un beso en la frente, dos en cada uno de sus párpados y uno en su mejilla -Gracias- Harry cerró los ojos para poder dormir junto con su chico ¿Harry?-

-¿Si?-

-Tambien te amo-

-Lo se- ambos sonrieron y se quedaron dormidos.