Capítulo 5 | La Subasta ( Reescrito)

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-Veinte minutos tarde. -Masculla Rainer en cuanto mi culo hace contacto con los asientos del auto. -Te dije que estuvieras lista, tenías cuarenta minutos y en lugar de arreglarte, malgastate el tiempo usando redes sociales.

Nota mental: No Colocar el "en línea" en las redes sociales.

-Acelera, no pienso quedarme afuera por la Estupidez de personas irresponsables. - Ordena Feroz.

-¿Pueden hacer eso?- Mi pregunta sale sin procesarse, simplemente se ha salido desde adentro.

Rainer rueda los ojos con notorio estrés y tensa su mandíbula de modo a que esta queda definida y marcada.

-Es una gala benéfica. - Ríe irónico. - Sería una aberración si dejaran fuera a su mejor postor.

No respondo ante esa premisa, por lo que el camino se hace lento, silencioso y lleno de tensión.
Remuevo mi cadera un poco cohibida, y vuelvo a intentar hacer fluir una conversación para aminorar la tensión en el ambiente.

-¿Cuál es el motivo por el que se está realizando la subasta? - Rainer ni si quiera se toma la molestia de observarme, sigue viendo a través de la ventanilla.

-Es a favor de dos fundaciones: una contra el cáncer y la otra contra el abandono animal. - Espeta justo cuando creo que no va a responder

-Ambas son buenas causas. - Él ríe.

-No lo hago por ayudar, la única razón por la que asisto a esas mierdas con personas hipócritas es porque es la única forma de poder reunirme con empresarios que pueden aportarme algo. - Tamborilea sus dedos contra el vidrio de la ventanilla.

-Negocios. - Asiente y me observa como si fuera la cosa más insignificante del mundo.

-Creí que nunca llegarías a la conclusión. - Farfulla burlesco. - Nos juntamos en una sala ajena a el evento, ahí solo tienen permitida la entrada los empresarios más influyentes, no hay espacio para mediocres y mujeres.

-¿Una mujer no puede ingresar?

-Solo los más poderosos pueden hacerlo, una mujer jamás llegará por sus propios medios a donde estamos todos nosotros. - Hundo mis cejas con molestia...

Es increíble la misoginia qué existe en la industria empresarial y lo peor es que los hombres parecen regocijarse en ella. Una mujer puede ser lo suficiente capaz de llegar a donde ellos están, por sus propios medios, sin vender su cuerpo o ser heredera de alguien, lastimosamente por hombres como Rainer, eso llega a ser casi imposible; sin embargo, no imposible. Para mí no será imposible.

-¿Qué hacen las mujeres, entonces? - Mi voz suena molesta, ni si quiera tiene que decirlo Rainer para que yo misma me percate de ello.

-Verse como un lujo frente a los demás invitados y elegir el objeto que más les guste de la subasta.

-Vaya...

- Allá adentro todo es un teatro y dependiendo de que posición social tengas, es como te van a tratar. - Presto atención. - Las asociaciones en sí no lo hacen por amor a la caridad, solo es una cortina de humo entre los dueños para enaltecerse y converse de que aportan algo a la sociedad. En general, las subastas son patrocinadas por uno de los miembros del régimen social, su esposa se encarga de todo mientras que él es el anfitrión de las reuniones a las que asisto...

-Suena como la obra de teatro del año. - Me cruzo de brazos.

- Y eso no es todo, la prensa está encargada de dar la mejor publicidad, por ello, cuando una de nuestras compañeras compra un objeto, ellos tienen que esperar a que volvamos para tomar una sesión de fotos que demuestre que contribuimos a la caridad.

Sin sentimientos (+18)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant