Enamorada de mi paciente [Gemeliers Hot] [Terminada]

Capitulo 14

Me coge de la cintura y me acuesta en la cama, haciendo que el quedara encima mío.
Empieza a besarme el cuello dejando pequeñas marcas.
Bajaba lentamente, asta llegar a la tira de mi sujetador, que finalmente quitó.
Empezó a chupar el pezón izquierdo mientras que con el otro lo masajeaba suavemente con su mano.
Después lo hizo al revés.
Iba bajando lentamente su boca, besando cada zona de mi cuerpo.
Asta llegar a la camisura de mis bragas, que con sus dientes me las quita.
Yo hice lo mismo con sus calzoncillos.
Jesús se levanta, coge un preservativo de un cajón y se lo pone.
Vuelve a ponerse encima mío y me beso lentamente, pero con mucha pasión.
Junta su frente con mi frente, nos mirábamos fijamente a los ojos.
Aquellos ojos color cafe que tanto me enamoraron desde el primer momento.

-Te amo..-Me susurra Jesús, juntando sus labios con los míos.

Al poco rato nos separamos y volvemos a mirarnos.

-Te amo.-Le susurre yo, mientras le devolvía el beso.

Y entro en mi.
Se movía lentamente.
Salía y entraba, salía y entraba, salía y entraba y así, asta perder la cuenta.
Sus embastadas eran mas fuertes y mas rápidas.
Contra mas gemía mas rápido iba.
Asta llegar al orgasmo.
Llegamos los dos a la vez, cosa que nunca con ningún hombre me había pasado.
Cuando acabamos, se levanta tira el preservativo y vuelve a la cama, donde se tumba al lado mío.
Yo me levanto y me pongo unas bragas y la camiseta de Jesús.
Que bien olía, me encantaba su olor.
Me vuelvo a tumbar en la cama y Jesús me abraza.
Yo apoyo mi cabeza en su pecho, mientras que con la llama de mis dedos hacia pequeños círculos en su pecho.
No decíamos nada, mientras estaba con el me sentía bien, cómoda, protegida.
Era yo misma.
Estuvimos un rato así, asta caer en un profundo sueño.

(...)

Me desperté por los rayos de sol.
Abrí lentamente los ojos, y me encontré a Jesús, que aun estaba dormidito.
Parecía un angelito, tenia la boca abierta, y se le caía la baba.
Estábamos en la misma postura que ayer.
No paraba de mirarlo, era tan perfecto.
Aun me pregunto como un chico como el puede estar con una chica como yo.
No pude evitar sacar una sonrisa.
Me fijo en el reloj que tenia justamente en la mesita de al lado.
¡Joder son las 7:34!
Pego un bote y me levanto con rapidez de la cama.

-Jesús despierta.-Digo con nervios.

Pero apenas se levantaba.

-¡Jesús coño despierta!

Esta vez si que se levanto, y del grito que he pegado, creo que e levantado a medio pueblo.

-Que pasa, ¿Porque gritas?

-Vamos que es súper tarde, ¡vístete ya!

-Vale, pero si vas a ir con mi ropa, con que me visto.-Veo que se estaba riendo, mientras se mordía el labio inferior.

Miro abajo y veo que tengo la camiseta y el pantalón de Jesús.

-Joder.

Me lo quito en seguida y se lo tiro a Jesús.
Del cajón cojo un sujetador nuevo, y del armario saque una falda negra ajustado, ni muy larga ni muy corta, y una camiseta blanca metida por dentro de la falda.
Los tacones de siempre.
Me peino el pelo y me hago pequeños rulos.
Me maquillo un poco, lo básico, la raya, el rímel y un poco de pinta labios color rojos pasión.
¡LISTA!
Eran las 7:45.
Bajo a la cocina donde se encontraba Jesús haciendo el desayuno.
Me acerco a el, y le abrazo por la espalda.
El se gira, me sonríe y me abraza.

-¿Que has hecho para desayunar?

-Tortitas.

-Mm.. Que ricas.

Jesús empezó a poner los platos de tortitas y un vaso de naranja para cada uno.
Y empezamos a desayunar.
Al cabo de unos cuantos minutos acabamos.
Cosa que costo mucho porque Jesús no paraba de mancharme la cara de chocolate y de besarme.
Nos ponemos las chaquetas y cojo mi bolso y salimos de casa.
Jesús me pone su brazo encima de mi hombro y empezamos a caminar asta llegar al coche.
Nos montamos y este arranca el coche.
Una vez llegamos...

...

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