Capítulo 2 PREADOLESCENCIA

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- ¿Quién és? -le pregunté a mi padre intentando mirar la foto- Dejamela ver.

-Es una chica, se llama Nuria. -giró el móvil y la pude ver- ¿Qué te parece?

-No es fea... Es mona -vamos Alicia no seas tan directa- Podría ser peor.

Sabía que Nuria no era una amiga como mi padre decía, que si, tendré 8 años pero no soy gilipollas. Y no me equivoque, semanas después empezaron a salir, mi padre ya no dormía en casa casi por lo que me quedaba con mis abuelos y mis tíos.

Por las noches lo paso un poco mal porque siempre me ha dado miedo dormir sola, siempre he dormido con mis padres y el hecho de no dormir con nadie me hacía sentir sola.

Dos meses después mi padre se mudó con su nueva novia, no quería que se fuese. Todavía recuerdo cómo me pasé aquel día sin ánimos y llorando, sentía que la historia se repetía pero que esta vez la que se quedaba sola era yo.

Un día de agosto mi padre me llevó a casa de su nueva novia, ella era muy maja y me caía bastante bien. Recuerdo que para comer hicimos pollo y dios estaba riquísimo.

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-Abuela no quiero dormir sola.

-Alicia, tienes 8 años no crees que ya eres mayorcita para dormir sola cariño?

-Abuela... -insistí- Por favor...

-¡Está bien! -dijo riendo- Dormirás con tu tía Ángela, ¿te parece?

-Si!

Al fin, me cambiaba de habitación y dormía con mi tía Angela.

Antes de que mis padres se separasen yo dormía con ella, pero cuando mi madre se fué yo empecé a dormir con mi padre.

Algo que me gustaba mucho es que siempre he sido muy unida a mi tía Ángela, juntas somos como una sola, ella siempre está conmigo y lo pasamos muy bien. Cuando le dije que volvía a dormir con ella ambas estábamos tan felices, que aquel momento lo enmarque en mi mente.

Agosto 2015

-¿Dónde vamos mamá? -pregunté mirando a ver si reconocía las calles pero no había manera- ¿Porque aparcas aquí?

-Van a venir unos amigos.

-¿Unos amigos?

-Aja.

Vale, solo són unos amigos de tú madre Alicia, no te rayes anda.

-Alicia, te presento a Rafa y a Juan.

-Hola.

Entrecerré los ojos como si tuviera rayos x y empecé a escanearlos un momento... Porque mi madre dejaba conducir el coche nuevo al tal Rafa pero este quien se cree?

-Oye, Rafa -lo llamé- Enséñame tu carnet de conducir o no conduces este coche.

Lo sé, soy muy inteligente. En ese momento mi madre giró la cara hacía mi y no me hizo falta escuchar ninguna palabra para saber que como dijese algo más por mi bonita boca España se me haría pequeña para correr.

-Soy mayor de edad Alicia.

Dijo con una risa nerviosa.

-Eso ya lo sé, tienes unos treinta. -sonreí con malicia- Ahora quiero ver tu carnet de conducir, si no no conduces mi coche.

-Esta bien.

Me enseñó su carnet de conducir y sonreí, siempre me salgo con la mía.

-Como le hagas algo al coche lo pagas tú.

Cuando las olas rompenWhere stories live. Discover now