El amor en los tiempos de la bicicleta 2

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Llegó agosto, en la primera semana y cuando desperté, el amigo Kevin se había ido a trabajar de jardinero; costó levantarme de la cama que preparé los pedidos de dulces, luego del desayuno y darme un baño para reponer, al cerrar la reja Bruno estaba afuera del taller.

- Buena Mario, cómo estamos.

- Buena amigo Bruno, bien aquí saliendo a repartir dulces.

- Genial, oye quiero escuchar tus historias de cuarentena.

- Cuando llegue de vuelta te la quiero contar ¿vale?

Después de una mañana, llegué a tiempo a almorzar y Bruno estaba esperando, lo invité a mi casa que le di almuerzo.

- Muy bueno tu almuerzo Mario.

- El arroz turco que preparé.

- Claro, oye cuéntame la historia.

- De la cuarentena, vale.

Los primeros días de septiembre del año pasado, con el amigo Kevin organizábamos la fecha de los conciertos en línea para las fiestas patrias y al realizarlas le digo a él:

- ¿Te tinca en esta fecha?

La programación era el día 19 de septiembre.

- Sí me tinca, este mes voy a estar de cumple.

- Claro, el día 20 compadre.

- Ay, solo quiero celebrar mi cumple contigo amigazo.

- Encuarentenados, por no decir otra cosa.

Algunas veces hacía clases de yoga, todo este tiempo he ahorrado por lo que el objetivo no solo es enseñar, sino para que tengan una base del conocimiento, es decir, lo que saben.

- Clases de yoga, buena Mario.

- Y me fue súper bien amigo Bruno

De pronto, Kevin llamó por teléfono.

Llamada de Kevin

- Aló.

- Hola Mario, cómo estay.

- Bien y tú.

- Bien, oye a las 17:30 llego a la casa ¿vale?

- Vale, te espero, nos vemos.

- Nos vemos chao.

Fin del llamado

- El compañero se preocupa por ti.

Reí como loco.

- Sí, nos queremos mucho como hermanos.

- Se nota, por cierto me voy al taller.

Le dije que gracias por todo y veo al amigo Alex.

- Buena Alex, cómo estamos.

- Buena hermano, oye ¿puedo pasar?

- Claro, así te cuento mis historias.

- Vale hermano.

Alex trajo su bici y fuimos al patio.

- Mientras lavamos tu cleta, te quiero seguir contando.

En esos días hicimos delivery, repartiendo dulces que preparo y a domicilio, por las fiestas que con el amigo nos fue muy bien; llevábamos un mes de cuarentena, que el tiempo pasó volando e incluso hice un video tutorial sobre la limpieza de la bicicleta.

Gracias a la ayuda de Kevin, por hacer grabaciones y colaboraciones musicales, las ventas de los dulces que lo disfruté; en todo caso, hice listados de canciones en un cuaderno que lo dejaba listo y tuvimos conversaciones.