Ninguno podía hacer nada por ayudarla, no podía traspasar esa extraña barrera por mucho que lo había intentado. Y se veían relegados al papel de simples espectadores.

El rostro habitualmente inexpresivo de Sasuke daba miedo, Hebi nunca lo había visto tan enfadado como para abandonar su perpetua máscara de calma. Si se rompía la barrera, el discípulo de Orochimaru desearía no haber nacido.

Les llegó a los oidos la voz burlona de Kabuto que seguía sin dar tregua a la pelirrosa.

-nee, ¿esta vez no vas a pedir auxilio ?, ¿no vas a gritar "Naruto, Sasuke-kun, sensei"? - se mofó poniendo una voz aguda en un intento por imitar a la chica.

Se agachó a su lado y la obligó a mirarlo a la cara sujetándola del pelo con lo que consiguió que la ojijade le escupiera al estar a su altura. Él le pegó una fuerte bofetada y se levantó todavía sosteniéndola por el cabello.

- bien, porque igual que entonces, ellos no vendrán a ayudarte… Sakura-chan.

Por un instante Sasuke pudo ver como un brillo de ira cruzaba los ojos de la pelirrosa que se mantenía arrodillada a un lado de su enemigo con la cabeza alzada por la fuerza con la que este tiraba de su melena.

-no… te permito… que me llames así - dijo la kunoichi con la voz impregnada de cólera. Ya había aguantado bastantes impertinencias de ese bastardo, sólo Naruto podía llamarla Sakura-chan. Esto la hizo reaccionar y darse cuenta de que podía acabar con ese gusano. No volvería a ser débil, lo había prometido.

Y después de pronunciar estas palabras clavó fuertemente un kunai en el pie de Kabuto haciendo que este la soltara lanzando un grito de dolor. Ella se puso en pie rápidamente y le asestó un puñetazo cargado de chakra que lo mandó a chocar contra la pared opuesta haciendo que tosiera sangre.

-¡Por fin reaccionas pelo chicle! ¡Deja de parecer una debilucha y patéale el culo! ¡Me avergüenzas! - el grito de Karin llegó a los oídos de la ojijade.

-¡Shannaro! ¡De debilucha nada, cuando termine con él serás la siguiente cuatro ojos!

A partir de ese momento, se desató una encarnizada lucha en la que los dos contendientes atacaban y se defendían sin descanso. El ninja del sonido era ágil y esquivaba los puñetazos mortales que la pelirrosa le lanzaba, atacándola sin tregua.

Golpes que en una batalla normal habrían dejado fuera de combate a un ninja, en esta no lo hacían ya que al ser los dos medic-nin, se curaban a sí mismos sobre la marcha haciendo que la pelea se alargara. Si seguían así pronto se quedarían sin chakra.

De pronto una de las patadas de Kabuto acertó a la pelirrosa en el estomago y aunque no poseía la fuerza de la chica, la hizo caer dolorida al suelo a unos metros de su oponente. Sakura intentó levantarse, pero volvió a caer sobre el terreno con una mueca de dolor.

El Sharingan de Sasuke giró enfocándola presintiendo el final de la batalla.

El ninja del sonido soltó una carcajada triunfal y se acercó a ella enarbolando sus armas con la intención de poner fin a su vida.

-Lo ves, al final no sirvió de nada todo tu entrenamiento, sigues siendo débil - la miró riendo - now vas a morir, aunque no sé por qué Danzo tiene tanto interés en que desaparezcas, eres insignificante. ¿Últimas palabras?

El pacto (SASUSAKU)Where stories live. Discover now