Michael y yo habíamos sido regañados por Ashton un buen rato.
Michael parecía ya saberse todo el sermón de memoria, pues cada vez que Ashton decía algo, el lo repetía, haciéndome reír.
Despues de una hora con Ashton diciéndonos “Ojala ambos queden calvos, malditos imbéciles.” , decidi ir a dormir. Nunca me había divertido tanto.
Todo era perfecto, todo menos Luke.
Arrogante, estúpido, jirafon y sarcástico. Y a pesar de ser todo eso, el muy maldito estaba bueno.
Parecía que por cada defecto en su actitud, Dios le obsequiaba una virtud física.
—¡Buenos días, enana dormilona! —grito Calum, acercándose a mi. Depositó un beso sonoro en mi mejilla.
—¿Que hay, gemela rosa?—dijo Michael, refiriéndose a nuestro cabello. El chico se encontraba sentado en el sillón, y a su lado estaba Luke.
—Buenos días a ambos.—respondi, ignorando a el susodicho ya mencionado.
—Mike, ¿de verdad le pintaste el cabello de rosa? ¿no crees que la chica ya se ve suficientemente inmadura?
Ignoralo, Emily, ignoralo.
—¿Como esta la quemadura? — pregunto Calum. Ah, si la quemadura. Historia graciosa, si.
Despues de el muy divertido, pero insistente, regaño que nos lanzo Ash, Mike decidió salir a fumarse un cigarrillo.
Los tres salimos, para dejar que el teñido satisfaciera sus ansias.
Justo cuando Michael estaba a punto de prender la droga, Calum exclamó un “¿Señora Clifford? ¿No se supone que vendría el mes que viene?” , el teñido muy asustado, apartó el encendedor rápidamente, mientras el chino reía a carcajadas por su broma, ninguno de los dos se percató de que el encendedor había rozado mi brazo.
Asi que si, parece que no todo fue tan perfecto.
—Eh, creo que esta bien. El ardor ya paso.
—Ah, ¿enserio? Que lástima. —exclamo el rubio.
—No, ¿sabes que es una verdadera lastima?, que ninguna de las chicas con las que te has acostado te haya contagiado el sida.
—¿Por que asumes que me acuesto con todas las chicas?
—Disculpa, no quería sonar homofóbica, no sabia que eras gay.
—No eres para nada divertida, Emma.
—¡Mi nombre es Emily!
—Lo siento, Amy.
Antes de que pudiera contestar, salio un soñoliento Ashton con mala cara.
—¡PODRIAN AMBOS, MALDITOS INMADUROS DEJAR DE DISCUTIR!
—No les grites, amo verlos pelear. Le apuesto a Emily. —respondio Mike.
—Que gran amigo, bro. —dijo sarcástico Luke.
—Cuando tengas unas tetas así, te apoyaré.
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Lamento haber tardado todo un mes en subir. Estoy escasa de ideas y de tiempo. Estoy algo ocupada, por los exámenes y los trabajos, pero tratare de subir más seguido.
Gracias por el apoyo.
