06; Sin color [Final]

637 90 13
                                    

[Smut no explícito]

El cuerpo de Minho estaba caliente, podía sentir como hervía por dentro y como los besos de Chan no ayudaban en nada. En realidad, los labios de Chan sobre su miembro no ayudaban de nada a controlarse. Se sentía avergonzado y tonto, porque se estaba dejando tocar por su menor. Estaba dejando que aquel joven chico recorriera su cuerpo con la punta de su lengua, que sus labios dejaran moretones sobre su lechosa piel.

Por primera vez en su vida, estaba experimentando esta clase de placer, durante tantos años no había sentido la necesidad de darse aquel placer, no era como si le llamara la atención hacerlo. Lo sentía como algo normal, sin embargo, ahora estando de esa manera con Chan, lo hacía sentirse extrañamente emocionado.

Era una sensación nueva, llena de adrenalina y nerviosismo, no quería echar a perder las cosas por su falta de experiencia, puesto que nunca había hecho algo como eso y tampoco había tenido la necesidad.

Sus manos temblaban, estás estaban aferradas a los hombros de Chan, su respiración era agitada su pecho subía y bajaba, casi al compás de su corazón, las caricias del menor en su cuerpo lograban ponerlo nervioso, sin embargo, no estaba dispuesto a parar ese momento, por mucho que resultará loco el hecho de estar en esa situación con alguien mucho menor que él, y con alguien que acababa de conocer, quería seguir con lo que habían empezado.

Chan se encargaba de tocar más allá de sus piernas, su respiración también era agitada, también tenía los cables cruzados en ese momento, pero es que no podía ignorar el hecho de lo que estaba haciendo con alguien que era mucho mayor que él. No quería incomodarlo, tampoco quería hacerlo sentir mal, probablemente era la primera vez de Minho, de alguna manera quería que el mayor lo detuviera, puesto que sabía que sino lo detenía en esos momentos, ya no podría controlarse.

Lo último que quería era lastimarlo, porque había escuchado que ese tipo de situaciones eran dolorosas, y no tan placenteras como muchas personas solían decirle, no quería hacer sentir de esa manera a su Hyung, pero como siempre dicen; a toda acción una reacción.

No podía pensar con claridad, lo único que podía imaginar era el cuerpo desnudo de Minho, su piel blanquecina y tan suave, sus piernas largas y tonificadas, sus labios perfectos ya humedecidos, y su rostro terriblemente deformado por el placer del momento.

Sabía perfectamente bien que Minho no era un experto en esa situación, pues por lo que llevaba conociendo de él, sabía que nadie había vuelto a buscarlo con algo de interés. Esa era otra razón por la que no quería parar, porque de esa manera podía hacerle entender a Minho lo mucho que alguien puede llegar a quererlo.

Si antes había estado solo, ahora mismo podía demostrarle que nunca más lo estaría.

El ojigriz soltó un pequeño jadeo al sentirse completamente lleno, solamente bastaron unos minutos para cuando Chan ya estaba dentro de él. El mayor sintiendo un fuerte dolor en su estómago y en su entrada, porque era su primera vez y dolía mucho.

Solamente escucho a Chan susurrarle que todo estaba bien, que el dolor se iría con el tiempo, que solamente tenía que relajarse y dejarse llevar. Y eso hizo, el dolor comenzó a ser poco y soportable, sin embargo no se iba.

Esa fue la primera vez en toda su vida, que alguien lo reclamó con amor.

Pudo descubrir muchas cosas, desde nuevas emociones hasta antiguos recuerdos. Porque estando con Chan podía recordarlo todo y enterarse de muchas cosas, sus lágrimas eran reales. Su rostro estaba empapado en lágrimas, y no sabía precisamente si eran por placer o por tristeza.

Es decir, hace muchos muchos años que se había dejado de sentir amado, querido y necesitado por las personas que lo rodeaban. Y que ahora alguien como Bang Chan apareciera de la nada, dándole ese amor y esa atención que le gustaba, era cómo estar experimentando demasiadas cosas buenas.

- ̗̀ ❲𝗬𝗼𝘂𝗿 𝗲𝘆𝗲𝘀 𝘁𝗲𝗹𝗹 ੭ 「𝖺𝖽𝖺𝗉」Where stories live. Discover now