¿Enamorado de una vampira?

Cap 42

- ¿Se recuperará?-
- Sí, solamente tenéis que darle tiempo. Los cortes que tiene por el cuerpo son profundos y se ha roto varias venas. No se podrá mover mucho, así que no hagáis esfuerzo para moverlo. ¿Vale?-
- Gracias- la voz más dulce se acerca cada vez más a mi oído- ¿Por qué tuvo que hacerlo?-
- Sufre demasiado, Emma. Se auto castiga por lo que te hizo- le responde mi hermano-
- Pero yo no quería que estuviera así, Tom. Sabes que yo...lo sigo queriendo después de todo. Me duele verlo mal, por eso le peleo-
- Tranquila, estará bien. Yo también me asusté cuando lo encontré así, y mucho. Ven aquí- me puedo imaginar que se están abrazando-
- Lo quiero, Tom. Si tú vieras las confusiones que está teniendo Adam últimamente porque no conoce a su padre-
- Lo siento mucho-
- Quiero que todo se arregle, que deje de ser como es. Quiero que vuelva a ser el Bill Kaulitz que conocí hace casi cinco años, Tom. Risueño, encantador, tierno, y sobretodo que se cuide de nuevo. Antes hacia su deporte por las mañanas y estaba muy bien. Y lo veo ahora tan delgado y tan estropeado...-
- Os dejaré tiempo a solas cuando despierte-
- Lleva dos noches sin despertar-
- Pronto lo hará. Te prometo que lo ayudaré también, lo llevaremos a terapia. Eso no es nada malo- le responde mi hermano. Yo ahora mismo tengo un nudo en la garganta que me ahoga, me está disparando con balas de plata con cada palabra que pronuncia. La amo, de verdad que la amo, y me arrepiento de todo lo malo que hice. Empiezo a toser cuando mi garganta se seca de repente por el nudo que tengo hecho, eso me obliga a incorporarme un poco. Pero me duele todo el cuerpo y me doy cuenta de que estoy completamente vendado. Me vuelvo a acostar por el dolor, pero los miro después de maldecir en voz baja por el escozor en mis heridas-
- Hola, chicos-
- ¡Dios santo, Bill! ¡¿En qué estabas pensando?!- me pregunta ella totalmente histérica- ¡Me tenías fatal!-
- Lo siento- me sorprendo cuando me abraza, me da igual que me duelan más los cortes. Ella me los está sanando-
- ¡No se te pase por la cabeza volver a hacer tal cosa, por favor! ¡Podrías haber muerto!- me coge las mejillas con ambas manos, y me mira directamente a los ojos- Por favor-
- Está bien- me vuelve a abrazar, y con mucho esfuerzo la abrazo también- No, no te muevas mucho- Tom también me echa la regañina al despertar, peor luego se ablanda como siempre-
- Dejo que habléis, chicos- sale de la habitación dejándonos a ambos solos-
- Emma- me mira, yo le acaricio la mejilla levantando el brazo con dolor. Pero me da igual- Lo siento tanto, cariño- se pone a llorar, pero yo odio verla de llorar- Eso no, por favor. ¿Por qué lloras?-
- Por tí- me vuelve a mirar- No quiero verte así de mal, Bill-
- Es el único refugio que he encontrado desde que te perdí, Emma. Desde que os perdí a los dos. Lo siento, amor mío. Sabes, he estado lamentandome todo este tiempo, castigandome, culpandome de todo, me he arrepentido de muchas cosas. Soy un sucio, un borracho y un desgraciado. Mi madre estaría muy decepcionada de mí, me daría vergüenza mirarla a la cara- se seca los ojos, y me vuelve a mirar- Mi único deseo en este año es poder arreglar las cosas contigo, poder disfrutar de mi hijo como debí hacerlo. He sido un hijo de puta contigo y con él, Emma- la miro a los ojos- Te sigo amando, por eso hago lo que hago. Por eso bebo, por eso me estoy destrozando. Porque te amo, pero tú ya no me amas desde hace tres años. Y si al final a abramos como simples amigos, que sepas que yo nunca te veré cómo una amiga, eres especial. Lo único que quiero es que me dejes estar con mi hijo, porque cambiaré, y te prometo que lo haré. Lo prometo por Adam- le digo entrelazando nuestros meñiques con mi mano libre, la otra me la atrapa entre su mejilla y su hombro mientras sigue llorando- Te lo prometo por él, Emma. Porque haré lo que sea por volver a tí y por criar a Adam contigo. Te echo mucho de menos, mi amor- me vuelve a abrazar, yo le acaricio el cabello suspirando de manera satisfactoria. Por fin volvía a sentarla cerca de mí. Rompo a llorar yo también, me siento el ser más mierda del puto mundo-
- No, no llores. No me gusta que e pongas a llorar-
- Ahora me entiendes- suspira secando sus ojos de nuevo-
- Tom y yo te ayudaremos- sonrío- Te llevaremos a terapias y a psicólogos para que vuelvas a ser el Billy que conocí, cielo- se tapa la boca corriendo al pronunciar esa palabra, pero yo sonrío-
- Gracias, pequeña-
- Hay alguien que te quiere conocer, que lo sepas- me dice sonriendo- Está afuera con Emily-
- ¿Es....?- asiente- Dios mío, si me ve así se asustará-
- Por eso traigo esto- me visto despacio con su ayuda, y me pone una bufanda para que el pequeño no vea los cortes del cuello. Me tapa y me prepara, todo lo hace de manera delicada y tierna. Perdí a una gran vampira- Estaba en el baúl de mi casa, no sé qué hacía allí-
- Te llevaste el baúl, es verdad- asiente-
- ¿Listo?- asiento. Ella suspira, y me da una pequeña sonrisa mientras peina mi alocado cabello. Se levanta y abre la puerta, entonces aparece el ser más tierno de todos los tiempos- ¿Quieres conocer a papá?-
- ¡Sííí!- entra con él en brazos, y cierra la habitación. Lo deja sobre la camilla, él me mira- Es el extraño, mami-
- No, nunca fue el extraño. Te asustaste sin motivo, cielo- él me mira de nuevo- Él es papá, papá Bill- sonrío-
- ¿Papá Bill?- asiento- Me gusta- sin evitarlo me levanto otra vez y lo abrazo, él ríe- ¡Oye, papi!-
- ¡Me acabas de llamar papi!- mis lágrimas de felicidad salen, al fin tengo oportunidad de acercarme a él-
- Eres un poco raro, ¿no crees? Vas todo de negro- me río como Emma-
- Tu madre también-
- Mamá es una vampira, yo soy un vampiro. ¡Y mira!- más feliz me pongo cuando se convierte en un cachorro-
- ¡Como yo!- él asiente, y se transforma de nuevo en un vampiro-
- He intentado que aprenda a controlar sus transformaciones, jejeje-
- Cierto. Mami me ha ayudado a transformarme, papi- la miro, ella tiene un ligero rubor en sus mejillas. Eso me hace sonreír-
- Mami es fantástica, cielo- lo cojo como cuando era un bebé, y él se agarra a mi camiseta. Aunque sin darse cuenta me tira de las vendas y me duele, pero aguanto para no estropear el momento- Muchas gracias, Emma- ella asiente sonriendo. Me acaba de hacer el lobo más feliz del mundo, he vuelto con mi pequeño-