𝕹𝖔𝖇𝖔𝖉𝖞 𝖈𝖆𝖓 𝖋𝖎𝖓𝖉 𝖔𝖚𝖙

2.5K 378 84
                                    

Pasaron unas horas, aún seguía esa moleta sensación en su parte baja, se había dado varias duchas debido a ello pero no pasaba mucho hasta que nuevamente apareciera. Estaba cansado. Tanto física como mentalmente. Seguía asustado, quería ver a Baji, quería que lo abrazara y le dijera que nada malo sucedería. Tenia tanto miedo de perderlo, no podía pensar en otra cosa. La impotencia lo abrumaba, había pasado toda su vida preparándose para ser un alfa pero ahora todo se iba al carajo, tenía ganas de llorar sin embargo ya no lo haría por lo que intento distraerse viendo algún anime o continuando alguno de sus mangas pendientes, de esta forma paso el resto de la tarde.

Bostezo y se estiró sobre su cama para luego ver al techo de su habitación. Tal vez no debía decirle a nadie que ahora es un omega. Takemichi por suerte era beta y no había olido sus feromonas, su celo duraría a lo mucho una semana si no estaba mal informado. Una semana sin ver a Keisuke. El probablemente se preocuparía y vendría a verlo, su hermano por obvias razones no lo dejaría entrar pero conociendo la terca personalidad de su amigo armaría un lío y lo que menos quería era una pelea entre dos alfas en su casa.

Y una idea llegó a su mente.


[...]


Keito cambió el paño húmedo en la frente de su hermano, había llegado hace unos minutos a casa y cuando subió a ver a Chifuyu lo encontró durmiendo, pero, al tocarlo se dio cuenta de que tenía la temperatura demasiado alta por lo que le colocó un paño frío para disminuirla. Debía ser duro para su pequeño. Pasó toda su vida creyendo que sería un alfa y resultó ser un omega, aunque él ya se lo esperaba, Chifuyu siempre fue un niño dulce, lindo y adorable. Para nada tenía pinta de ser un alfa, ni por que tratara de verse rudo en esa pandilla de niños vándalos.
El menor abrió los ojos lentamente y miró desconcertado a su hermano.

—K-keito.—Dijo casi en un susurro, estaba algo mareado.

—Shhh. No te esfuerces.—El mayor le acaricio el cabello suavemente.

—Estoy bien. —Trató de levantarse pero no lo consiguió, estaba muy débil.

—El celo de un omega es muy diferente.—Comenzó a explicar.—Al ser la primera vez, suele ser más doloroso, por ende tu cuerpo se debilita es así que necesitas feromonas de alfa para controlarlo. —Hizo una pausa y continuo.— Pero como nosotros somos parientes sanguíneos nuestros lobos se rechazan por eso no reaccionamos ante nuestras feromonas de forma sexual.—El joven adulto se levantó y tomó una sudadera para después dejarla sobre el abdomen de Chifuyu, de inmediato olfateó un agradable aroma. Café y nueces.— Es de Baji, la dejo el otro día en la sala.

La sangre subió de golpe a su rostro y no fue por la fiebre, con razón ese aroma se sentía tan familiar, a pesar de nunca antes haber olido las feromonas de Baji su lobo se removía contento. Quería apartarla, su lado racional le decía que no era correcto, pero algo en su interior se aferraba a esa prenda.

—Se que es incómodo ya que es de tu mejor amigo.—Suspiro y se apoyó en la puerta con los brazos cruzados.— Pero es lo único que he podido conseguir, no te traeré un alfa así que confórmate con eso.

Chifuyu se cubrió el rostro con la cobija, ¿Cómo podía hablar tan desvergonzadamente su hermano? Tampoco es como si él quisiese un estúpido alfa.

Solo a Baji-san.

Negó repetidas veces cuando el alfa de cabellos largos cruzó por su mente. No, no y no. Él estaba bien así. No importaba cuánto su omega pidiera por Keisuke, él no cedería.

Beggin' | BajifuyuWhere stories live. Discover now