Pecaria mil veces
pecaria.
Por besar tu boca ,
por tocar tu piel,
Por tenerte los
segundos, que parece
correr y no detenerse,
Y tomarse un descanso.
No me importa ser
el demonio que te
induciera,
A los pecados más
perversos,
A las locuras
extremas, que te
arrebatan de una
vida cotidiana,
Y te envolvieran en
olas en los caudales
ríos. De tu piel de
tu cuerpo de las
Almas ., y corazones
entregados, de un
ángel poseído por
el más apasionado
demonio.
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Mil y un noches de desveló
PoetryPues aquí no hay mucho que contar, solo tengo una petición para ti, mi querido o querida amiga, lee este libro cuando te sientas solo, cuando sientas ese nudo en la garganta que no te deja ni pronunciar una palabra ya que en ese momento podrás enten...