Una cazadora en Diabolik Lovers

~Chantajes sangrientos, Shin~

Me desperté adolorida y con dificultad intente diferenciar la oscura estancia, no era mi habitación eso era seguro, mire todo con detalle levantandome, delante mía había una especie de barrotes, piso de piedra y un montón de sombras a mi alrededor. Al intentar levantarme me di cuenta de que mi tobillo estaba encadenado, "pero que esta ocurriendo?!"

-Valla, ya te despertaste Cazadora-san *dijo la voz de aquella silueta que se alzaba detrás de esos barrotes*

-Quien eres? Donde estoy?! *pregunte tirando de las cadenas*

-No sabes quien soy Cazadora-san, eso me pone triste *dijo abriendo la puerta de aquella celda*

-Triste?.. *recorde el día de ayer"

"-No puede ser que no te guste estar conmigo Ayato-kun *dijo Shin cambiando su expresión a una terrorifica*
-Yo.. no, no quise decir es-.. *no termino la frase Ayato y miro al suelo intimidado*"

-Shi.. Shin-san! Por que me has encadena?! *le grite*

-Me alegra que ya sepas quien soy Cazadora-san, quería hablar contigo, pero en privado *explico cerrando tras de si la puerta*

-En privado?! y para eso tenias que encadenarme! *dije muy enfadada*

-Tranquila, tranquila Cazadora-san o quieres que le diga a todos a que clan perteneces? *me chantajeo*

-No tienes derecho a hacer eso! *le grite*

-Si tengo o no recuerdas que soy un Tsukinami *me 'recordo'*

-... *me mordi el labio para callarme*

-Bien Yumi Meiha.. No? *se agacho quedando a la altura de mis ojos* Con que cazadora dhampira con la misión de destruir a todos los vampiros relacionados con Tougo Sakamaki, eh?

-Como sabes tanto?! *pregunte alarmada*

-Jajaja tengo mis trucos Yumi-san *dijo agarrandome del mentón*

-Entonces que quieres de mi? *fui directa al grano*

-De ti?, no es obvio? *me pregunto con una sonrisa macabra que se veía aun más terrifica en aquella lúgubre oscuridad*