Promesas * Max Verstappen *

22

Max

—Estamos muy orgullosos de ustedes!— gritó Charles apenas pusimos un pie en el departamento de Gianna.

—Charles ¿De verdad?— lo miré bastante molesto.

—Vamos Max, esos golpes fueron buenos. No las hagamos sentir mal, hay que felicitarlas— levanté la mano haciendo señas de que no hablara.

Di media vuelta para ver a Gianna y Charlotte sentadas una al lado de la otra. La primera me dio una corta sonrisa.

—Supongo que es tarde para decir que te mentí— murmuró sin borrar su sonrisa angelical.

—Lo supe desde que dijiste que te golpeaste con la mesa— respondí sin relajar mi postura.

—Quería decírtelo pero...— la interrumpi.

—Creeme Gianna, lo hablaremos. Pero primero vamos a tocar otro tema... Tenemos que saber de principio a fin lo que pasó desde que Brad llegó— me senté en el sofá que estaba frente a ambas y Charles permaneció de pie.

Gianna empezó a hablar, contando un resumen, no había muchos detalles. Charles se llevó una sorpresa cuando nombró lo del embarazo.

Yo estaba cada vez más molesto ¿Se atrevió a amenazarla pidiendo que se alejara de mi?

Estúpido, si no iba a golpearlo era porque sabía a la perfección como era él.

Brad quería sus minutos de fama, pero por mi no los iba a conseguir.

—¿A dónde fueron?— preguntó Charlotte viendonos.

—Creo que nos cometimos en criminales— respondió su novio.

—Eres un exagerado Leclerc... No hicimos nada malo.

—Sobornamos a un guardia de seguridad!— gritó impactado.

—¿Cómo que sobornaron a un guardia?— cuestiono Gia.

—Charles, como no aprendas a cerrar la boca me harás enojar— le hablé con seriedad.

—Max — me regaño Gianna.

—¿Qué?— pregunté viéndola.

—Sobornar a un guardia si es delito— me expresó molesta.

—No fue tan así, él exagera... Y ni hablemos de delitos, ambas golpearon a un hombre. Auque se lo merecía, yo no golpee a nadie— me defendí levantando las manos.

—¿Estas molesto porque lo golpeamos?— dijo Gianna bastante confundida.

—No.

—¿Y se puede saber por qué estás tan molesto? — se puso de pie y quedó frente a mi.

—No voy a discutir con ellos aquí adelante— murmure viendola a los ojos.

—¿Y por qué quieres discutir exactamente?— me desafió, no seguí su juego y giré a ver a Charlotte.

—Es necesario que den una declaración, las tres. Cuanto antes mejor, así se adelantan a Brad, aunque estoy seguro de que no presentará cargos contra ustedes.

—¿Por qué estas tan seguro?— escuché a Gianna.

—Porque nunca querrá decir que su ex novia y las amigas estuvieron a nada de mandarlo al hospital. Preferirá decir que fue un perro o una caída antes que decir que fueron mujeres. Porque así es el idiota con el que saliste— respondí sin mirarla.

—Oh, el idiota con el que salí, pues te recuerdo que fue tu mejor amigo. Y tu fuiste tan cobarde que nunca te presentaste ante mi. No tuviste el valor de ponerte a prueba ni a ti, ni a lo que podía llegar a sentir yo por ti— me señaló molesta.