Chat Blanc 2.0 // Sandboy 2.0

ONE SHOT - Colegio #1

Author's note: Hola! Gracias por las espera. Como comenté en algunas ocasiones, la universidad me tiene cargada de actividades que debo realizar, por lo que mis tiempos de escritura han variado un poco. Me alegro que esta pequeña historia haya tenido apoyo, en el futuro quisiera escribir historias con mucho más desarrollo así que, tal vez en algunos meses cuando entre a vacaciones lo haga jeje.

Bueno, ya había dicho que tenía ganas de escribir pequeños capítulos que partieran de la premisa de la revelación, en este caso, será una de las interacciones que tienen en el colegio Adrien y Marinette, espero les guste, gracias!

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Habían pasado dos noches desde el día que Adrien descubrió la identidad de su lady, dos noches las cuales habían sido, particulares.

Justo la akumatización había sucedido el viernes, por lo que tuvo el sábado y Domingo para reflexionar e intentar calmarse, quería cumplir la promesa que le había hecho a Ladybug.

No le había texteado a Marinette todo ese finde, lo cual era bueno.

No es como que lo hiciera regularmente antes, pero ahora tenía de cierta manera, una mayor tentación a hacerlo.

Sin embargo, él tenía también en claro algo,

No buscaría enamorarse de Marinette solo por eso.

El siempre había sentido una atracción especial con ella y ahora que conocía su identidad creía entender el porqué, pero antes de dar pasos más grandes, prefería estar totalmente seguro.

Y justamente sobre eso estaba hablando con Plaga, su sueño no había sido completo esa noche, tenía muchas dudas y el pequeño Kwami era el único con el que podía discutirlo libremente.

-Escúchame, niño, yo he visto como se miran con o sin la máscara, deberías acelerar el paso y salir con ella- hace una pausa- es como si yo tuviera en frente un buen queso Camembert, siempre lo veo con las mismas ganas de devorarlo así que no pierdo el tiempo- A la criatura mágica se le ilumina la mirada con solo pensar en su delicioso queso, provocando una sonrisa por parte del rubio.

Plaga podría tener miles de años, pero tenía una emoción que Adrien sentía solo la podía transmitir un pequeño.

-Marinette no es un queso Plaga, debo conocerla más.

-La criatura mágica da un suspiro frustrado- Ustedes los humanos son muy complicados con el amor, aunque quisiera entenderlo, los Kwamis no nos enamoramos.

De repente, un molesto "Beep Beep" marcaba las 7, dándole la señal al ojiverde que debía alistarse para la escuela, debiendo enfrentar así, el reto de aquella promesa.

Termina la conversación con el kwami y procede a pararse para iniciar el día.

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Su rutina mañanera transcurrió normal, por lo que ya se encontraba en camino a la escuela, cuando de repente, visualiza en el camino a la azabache, se veía tan tranquila que Adrien esbozó una sonrisa.

Entendía todo el peso que cargaba ella ahora, equilibraba su vida entre ser ladybug y guardiana mientras que era una de las mejores estudiantes de la clase, junto con sus sueños de ser diseñadora.

-Es asombrosa.

-Adrien, con quien hablas?

Diablos.

-Perdona Nathalie, nada- La asistente le lanza una mirada dudosa, pero decide omitirlo.

-Ya llegamos, recuerda que estaremos aquí a las 4 en punto para tus clases de esgrima.