Capítulo #31

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Capítulo dedicado a ximesoto2003, a cristhelyul, VaneeNe3, Machu3 y nancy903 por sus votos y lindos comentarios 🥰

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Narrador omnisciente:

— Como el agua, álainn...

Esas últimas palabras causaron estragos en la mente de Megan al recordar la noche en que fue secuestrada.

— ¿Qué pasa, Meg? —su tono se volvió frío— ¿En qué te vas a escudar esta vez? Dime, ¿volverás a medicarte?

Damon, no te vayas por ahí. —susurró la rubia de ojos lilas.

— Pero es verdad, nonne ¿no vas a aceptar tu misión, Megan? Vas a huir, como mismo lo hiciste hace años atrás y me dejaste solo ¿verdad? ¿Todo lo que sucede es demasiado para ti? ¿Qué te crees? ¿Crees que para mí fue fácil aceptar que estaba maldito y todos a mi alrededor irían cayendo, uno por uno?

Ten cuidado, Damon. —advirtió una vez más su hermana al ver la reacción de Megan.

El cuerpo de la arqueóloga temblaba ante las palabras lacerantes del lobo. No lo aguantaba, ella no pidió nada de eso. Quería marcharse lejos, pero el alfa la obligó a mirarlo.

— No te vas a ir, álainn. No te dejaré marcharte, a sido suficiente. Deja de ser tan irresponsable, ya no eres una niña. ¿Vas a ignorar tu destino?

Él hacía todo lo posible por molestarla, ella era una bersercker y por lo visto, una que no tenía mucha paciencia. Sería fácil envolverla para que acepte el pacto, solo necesitaba que perdiera los estribos.

— La gran Megan Blacke no puede verse ligada a nada que la comprometa, ¿no es así? Dime Meg,  ¿prefieres seguir viviendo a las sombras? O tal vez te gustaría continuar con tu vida de niña rica.

— ¿Vida de niña rica? ¿Qué mierdas sabrás tú de mi vida, monstruo? —gruñó con la voz ronca y el rostro rojo de tanto llorar— Por lo visto desde hace siglos mi vida ha sido un asco, tú hablas de esa maldición que tienes y no sabes ni siquiera que es, pero yo... joder, yo sí estoy maldita.

La azabache parecía un animalito indefenso y asustado. Estaba cansada, muy cansada de la situación y de que él hablara de ella como si la conociera de siempre.

— Maldición es tener que lidiar contigo desde hace vidas pasadas y nunca salir ilesa, eso es una maldición. Una y otra vez suplicarte que soy inocente y aún así nunca me has creído, esta vez no ha sido la excepción. Ojalá te mueras.

Aquellas declaraciones contenían demasiada información para el alfa, era mucho que procesar en tan poco tiempo.

— Entonces necesitas saber por qué nuestros caminos se cruzan, Megan. Ha llegado el momento de que descubras quién eres, ¿no te parece? Sé que quieres venganza por todo lo que te he hecho. Vamos, aprovéchate de mí y humillame.

— No te necesito, solo quiero que desaparezcas. —le espetó en voz baja.

El alfa trataba de usar una psicología inversa para impulsarla a aceptar el trato, pero el único que estaba saliendo lastimado era él al recibir las frías y crueles palabras de su mate.

— ¿Crees que buscaré refugio en tus brazos? Estás enfermo realmente, me provocas asco Damon. Para mí eres repugnante y la verdad te quiero muerto, sin quedarme con cargo de conciencia.

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