˚ ִֶָ 🗝️ ♡︎ ₊ el rosa es para chicas

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jay iba caminando a una de las tiendas más caras de la ciudad, Pinky shop. Si alguien lo viera por esos lugares, pensaría que el pelinegro estaba extraviado o simplemente estaba allí por obligación de su "novia", pero eso no era así.

A pesar de su apariencia de chico sexy y rudo, jay tenía una debilidad por los objetos de color rosa que contenía esa tienda, es más, todos sus ahorros estaban destinados a ese lugar de ricos locos. Es verdad que el precio de oso de peluche era excesivo, pero él no podía aguantarse las ganas de comprarlo y ponerlo en su habitación rosita, lugar que absolutamente nadie pisaba.

El chico entró a la tienda, encontrándola vacía como siempre que iba. Le gustaba ir a esas horas tempranas para no tener que soportar los comentarios coquetos de las mujeres que se encontraba ahí y de paso comprar con tranquilidad.

Estaba mirando una nueva colección de sudaderas rosa chillón con gatitos cuando sintió un toque a su espalda, dándose la vuelta.

- Señor, la tienda de ropa de hombre está en frente.- le informó incómodo, el chico bajito que tenía frente a él. ¿Cómo una persona tan pequeña podría albergar tanta belleza?

- Oh, no. Estoy en el sitio correcto.- dijo, enseñándole una polera.- ¿No te parece adorable? Se parece a mi perrita.

- Disculpe, pero no parece una persona que vista así.- comentó nuevamente el chico de la apariencia dulce, y era verdad. ¿Por qué un chico de apariencia dark con ropa oscura y ruda querría una sudadera de esas? Ni siquiera jungwon se la pondría.

- Me gustan.- se encogió de hombros, sacando una de talla pequeña.- esta te quedaría bien, ¿no crees?

El dependiente lo miró confuso. ¿Por qué lo trataba así si ni siquiera sabían el nombre del otro? Suspiró. "Todo sea por el cliente". Miró la pieza de ropa, y sus ojos se abrieron con horror. ¿Quién en su sano juicio se pondría una sudadera rosa de felpa con corazones con purpurina en medio? Definitivamente quería renunciar, y apenas era su primer día.

- El rosa es de chicas.- respondió, alejándose de la prenda como si tuviera coronavirus. jungwon era estúpido, sí, pero no se le ocurrió otra manera de comenzar conversación con ese chico.

-¿te parezco una chica?

- No, pero tus gustos son extraños.- contestó nuevamente a sus preguntas, preguntándose por qué el chico alto lo miraba tan atentamente. ¿Qué tenía él de interesante para que le mirara tanto?

Mientras tanto, jay se estaba derritiendo por la ternura que le causaba el chico. ¿Qué criatura tan hermosa era? De sólo imaginarse con la prenda entre sus manos quería llorar de amor. ¿Estaba loco por pensar eso de un desconocido? Definitivamente. Pero, ¿por qué le parecía que el rosa era de chicas? park AMABA el rosa, de verdad que lo hacía, de una manera inimaginable. Si no fuera por que a él le queda mejor el negro, no dejaría de ponerse esas hermosas prendas que se compraba semanalmente de la tienda. ¿Eso significaba que era una chica? No lo creía, pero si el hermoso dependiente lo pensaba él estaría encantado con ello, por una muy simple razón:

- A las chicas les gustan los chicos. A mí también. ¿Soy una chica?