Capítulo 2: Esos Ojos... II

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Tres Semanas Después...

2:30PM, 5 de Marzo del 2032, Elef̱thería, Republica del Sílice.

<<Esos ojos que me han mantenido despierto, los he visto de nuevo>>

Escucho su voz, vio sus ojos, ¿Entonces por qué no lograba acordarse del nombre de ella?...

Han transcurrido tres semanas desde que perdió la memoria, en ese tiempo, vagos destellos de luz han mantenido vivas las esperanzas de Vyeter por volver a la normalidad. Así mismo, ha hecho el mismo trayecto de su casa hasta la escuela, esperando encontrarse de nuevo con la muchacha de la estación.

<< ¿Cómo olvidarla? >>

Esos ojos penetraron en el alma de Vyeter, dejándolo al desnudo, sus miedos, sus ilusiones fueron absorbidas por ellos. A cambio, él pudo ver dentro de ellos y lo que vio lo dejo anonadado. Ya que descubrió un océano lleno de sentimientos iguales a los suyos.

Encontrar a la dueña de esos ojos, se ha vuelto su misión, es lo único que lo desconecta del mundo distopico en el que vive, del hecho de que perdió la memoria y de las causas probables por las cuales lo hizo.

Sin embargo, no ha podido dar con ella todavía.

Las gotas de roció le aplastaban los pelos cortos. El viento helado le pegaba en la cara. Vyeter escondía sus manos dentro de su antigua chaqueta. Esta era una tarde lluviosa.

Para una ciudad rodeada por el desierto, la lluvia era un acontecimiento muy raro, el cual llevaba repitiéndose desde hace un mes.

El celular de Vyeter, comenzó a sonar repentinamente. El tono de mensaje era horripilante, él no se podía explicar cómo fue que se le ocurrió dejarlo así.

Haciendo un gesto de horror, Vyeter se sacó el dispositivo del bolsillo y presiono un botón para acallar tal ruido. En la pantalla, Vyeter vislumbro un mensaje de dos palabras, con aspecto de discurso.

"¿Dónde estás?"

El mensaje provenía del celular de su madre, Vyeter esbozo una breve sonrisa. Ya que, según sus propias palabras, a su madre no le interesa si seguía respirando.

Luego de contarle que perdió la memoria, ella hizo un gesto que ni una nueva amnesia podría borrar de la mente de Vyeter. Desde entonces ambos llevan una vida agridulce, juntos.

Ni siquiera, se tomó el tiempo para contestarle. La edificación de dos pisos color cemento, que tenía por casa, se alcanzaba a distinguir hacia final de la calle.

Vyeter suspiro con desdén, como siempre lo hacía. Acto seguido siguió caminando. Él era el único bajo la tormenta, de vez en cuando un auto pasaba por la calle y procuraba alejarse de la acera, pues terminaría bañado.

El teléfono volvió a sonar, tres gotas de agua cubrieron la pantalla. La horrible tonada fue silenciada a tiempo por Vyeter. En la pantalla había un mensaje, ahora de tres palabras.

"¿Dónde carajos estas?"

En vez de hacer decaer los ánimos de Vyeter, el mensaje le hizo sacar una gran carcajada.

<<Que importante eres Alí Zahir>>, pensó Vyeter.

Una vez más, echo el teléfono a su bolsillo y continúo caminando. A Vyeter no le importaba tener una madre histérica en casa esperándolo, ansiosa por molerlo a regaños. Su interés era llegar y dormir. Si dios se lo permitía y nada se cruzaba en su camino, podría hacerlo en un par de minutos.

Amnesia 2032: A la Orilla del OlvidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora