¡¿Tres Tony?!

Capitulo 5

El día había iniciado de la peor forma posible.

El clima era tormentoso, oscuro y frío. Stephen no había podido dormir bien pensando en la versión más pequeña de Tony y en cómo este le debería de ir en el pasado junto a su "increíble familia", lo único que logró consolarlo, era pensar que Jarvis y Ana estarían ahí para él. 

En cuanto se despertó se topó con otra noticia, se requería su presencia inmediata en la torre de los Vengadores, ya que él joven ingeniero tenía que dar un anuncio muy importante.

En cuanto llegó pudo notar de inmediato las ojeras debajo de los grandes ojos del mayor de los Tony, que trabajaba para mantenerse de pie. 

Caminó en silencio a su lugar, tomando asiento al lado de Bruce y Peter, quiénes se les veía igual de cansados, pero notablemente decaídos y afligidos, lo que le hizo saber al hechicero que eso no era un buen presagio para lo que sea que se avecinaba. Resignándose a lo peor mirar al muchacho en busca de su anuncio, cuestión que este pareció entender, ya que después de unos segundos, sólo se limitó a suspirar y a soltarlo todo

—No pude reparar la maquina—inició sin rodeos, hablando con la misma crudeza con la que siempre se había enfrentado a la vida—. Después de analizarlo mucho descubrí que para poder repararla, me tomaría meses. Ya que primero debo aprender toda la teoría que hay detrás de eso, así mismo debería realizar un estudio profundo y exhaustivo de cada uno de los planos para entender cómo revertir el efecto; estas dos cosas me tomarían semanas, no demasiado tiempo; pero digerir la información y poner en practica toda la teoría desarrollando la maquina sería sin duda alguna lo más difícil y lo que más tiempo tomaría.

Los ojos de todos se abrieron con preocupación e incredulidad, y de inmediato Stephen comenzó a preguntarle a Peter y Bruce si ellos no podían hacer algo, a lo que ellos negaron con frustración antes de explicarles que nadie era capaz de leer esos planos a excepción del mismo Tony, y que aunque su ayuda podría significar un avance, si sólo Bruce y Peter se encargarán de esos planos, llegarían a meses en poder descifrarlos adecuadamente para regresar a todas las versiones a sus respectivas épocas. Trabajo que el Tony del pasado con ayuda podía realizar en semanas.

Todos se quedaron en silencio, congelados por la noticia; sin embargo, Stephen no sólo parecía congelado sino que hasta la palidez de su cara incitaba que estaba preocupado, casi enfermo en pensar que su amigo tendría que estar tan lejos de él por tanto tiempo.

—Deben hacer algo—exigió Steve atemorizado—. Tony no se puede quedar allá, lo necesitamos—afirmó—. Yo lo necesito.

Vicent  puso los ojos en blanco molesto por tal descaro por parte del líder de su equipo; gruñó para sí mismo, mientras se levantaba y se acercaba a la versión mayor del genio que lo miraba interrogante.

—¿Qué necesitas?—le preguntó con determinación—. Dime qué necesitas y yo lo consigo.

—Sólo información y tiempo.

—cosas que no tenemos—replicó Wanda.

—Está bien, haz lo que puedas, tendrás ambas si así lo necesitas—respondió firme—. Creo en ti, sé que tú eres él único que puede lograrlo. Confío plenamente en ti y en tu capacidad.

Él joven afirmó en silencio, antes de observar como él hechicero anunció su retirada con la excusa que tenía asuntos que atender como hechicero supremo; cuando la verdad era que no podía hacer nada en el estado en el que estaba actualmente. En cuanto llegó al sitio, no pudo hacer nada, no pudo meditar ni leer. No podía concentrarse en nada. Su mente era un completo caos y su desbocado y sentimental corazón no parecía ayudarle mucho.