treinta y uno

875 52 1
                                    

desde aquella llamada que me rompió en dos, los días se me pasaron rápido, pero yo me sentía ida. como fuera de tiempo y  espacio. mi vida era más productiva. empecé el gimnasio, comía sano, salía con amigos, buscaba no pensar en valentin, en olvidar ese sentimiento de pérdida. de perderlo.  pero también me perdí a mi y los días pasaban como si nada, cuatro días, nueve días, tres semanas, un mes.
y yo se que de amor no muere nadie pero como le explicas eso a alguien con el corazón roto?
mis viejos seguían jugando a la familia feliz pero ya no me afectaba, en cierto punto los entiendo, no saben estar sin el otro. y no digo que sea amor, están lejos de eso. costumbre quizá, la costumbre es una mierda pero todos caemos en ella, si no caiste antes vas a caer ahora, o en unos años. nadie se salva. pero bueno, cada uno se miente a su manera, se inventa su realidad. tenemos que sentir algo para sentirnos vivos. y el humano no hace muy buena elección, ni siquiera en los sentimientos.
pensé que quizá yo también me acostumbré a valen.  quise aliviar mi dolor creyendo que a lo mejor no lo quiero, sólo me acostumbré a estar. 
como te acostumbras a alguien cuando nunca lo tuviste?. no hay forma. si nunca lo tuve por qué duele tanto?. tal vez para sentirme viva elegí sentir dolor.
también descubrí que cuando estoy triste cocino mucho. de hecho soy muy buena.

caos; wosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora