Rama de olivo

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La playa fue, de hecho, una terrible idea. Kara paso los siguientes dias sufriendo terribles quemaduras en su piel -con Lena riendose en el sofá- y Sam intentando ayudar -lo cual solo empeoró los celos de Lena.

Admitiendolo Lena estaba un poco preocupada, cada movimiento implicaba un quejido de Kara, su piel habia comenzado a pelarse de a poco, pero sabia que la rubia estaba bien. Sam había conseguido un ungüento de áloe para aliviar el ardor e irritación de la piel, ese pequeño pote había hecho milagros.

Para desgracia de Lena -o una misteriosa indicación del universo- debido a las quemaduras y lo incomodo de las camisetas rozando su piel irritada, la rubia había pasado mucho tiempo solo cubierta en un simple sostén deportivo.

Como había sido mencionado antes Lena era una verdadera amante de los abdominales, no hay razón para mentir, se que ustedes también.

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Lena se sentía mal, enferma incluso, pero sabia que no era una simple gripe. Nop, ella sabia que era peor que eso, ella tenía algo peor… ella tenía Luthitis, ¿Qué es? Sencillo, es lo que le da cada vez que su familia la visita.
¿Los síntomas? Irritabilidad, estrés, enojo injustificado, grandes ganas de ponerse ebria y necesidad urgente de abrazos. Razón por la cuál ahora mismo se encontraba acurrucada con Sam en el sofá mirando una comedia romántica, Un tonto cliché de obvio final sin sorpresas, pero servía para distraerla de lo que se avecinaba.

Este era difícilmente el primer año donde Lillian hacía sus visistas, la mayor parte de su infancia Lena estuvo cautiva en su propio hogar, donde era educada en casa por una institutriz, donde estaba tan ocupada con sus tareas y actividades que casi nunca veía a su familia, excepto por las visitas de su madre a su cuarto para las criticas del día y en sus veranos en Irlanda donde era enviada para que Lillian no tuviera que lidiar con ella constantemente, excepto que entonces eran mensuales.

Lena había odiado el internado, por suerte pudo convencer a sus padres de hacer la preparatoria en Metrópolis (después de exactamente 2 meses y 3 semanas de llanto consecutivos, básicamente todo el verano antes de primer año), en su primer día de libertad fue dónde conoció a Sam, hicieron click al instante supieron desde entonces que su amistad duraría para siempre. Pero volviendo al asunto principal, el caso era que Lena no era extraña de las visitas de su madre, su forma de controlar que Lena se comportara.

Las visitas incluían principalmente: críticas a su vestimenta, su cuerpo y sus decisiones en general, alabanzas a Lex y a lo buen hijo que era aunque no fuera más que un capullo, más críticas y después de unas cuantas amenazas extra maternales acerca de como debía comportarse, y entonces Lillian se marchaba, destruyendo la poca autoestima que Lena construía en los meses alejada de su familia. Sam lo sabía, y a pesar de que no la habían expulsado de casa como a ella, entendía lo difícil que era la situación para su amiga.

Sus familias eran ciertamente particulares.

Así que entenderan a Lena, cuando dicen que una feliz, no… era más que eso era… ultra radiante, Lena no sabía como describirlo, no era una emoción que ella experimentara, en fin, cuando una tormenta de felicidad llamada Kara Zor-El entró en el piso ese día saltando y cantando no fue sorpresa que Lena explotará.

Por supuesto que Kara estaba teniendo un día fantástico.

Se levantó de golpe, sentando a Kara de un empujón en el sofá y volviendo a acurrucarse junto a Sam, ambas la miraban con una cena alzada. Kara volvió a levantarse.

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⏰ Última actualización: Jul 06, 2021 ⏰

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