Tardé un poco en encontrarla, pero finalmente conseguí una de esas tiendas y compré un antifaz negro.

Luego de haber gastado una parte considerable de mi dinero fui devuelta a mi departamento.

Me di una ducha para quitarme toda suciedad de encima, saqué la misma ropa que había comprado de mi inventario.

Me la puse y me miré en el espejo.

El antifaz rodeaba mis ojos azules como el cielo, el sombrero ocultaba mi pelo y una parte de mi frente, el abrigo negro tenía un cuello en forma de 'V' que me llegaba hasta las orejas y ocultaba bastante de mi rostro, solo dejando ver mis ojos azules, los guantes blancos y las botas negras le dieron un buen toque.

La verdad, me sentía como un detective de las películas viejas, solo me faltaba un cigarro y..... .

Un momento...., ahora si puedo fumar, mi sistema hace que mis pulmones se recuperen del daño recibido por el humo, así que prácticamente me vuelvo inmune a los efectos negativos del tabaco.

Bien, para terminar con el look tengo que hacer la gran pregunta.

¿cuál de todas uso?.

Por que, aver, si uso los cigarrillos normales podría quedarme muy bien, pero también podría utilizar un abano.

Sinceramente, el que más me llama la atención es el de pipa.

Si, anticuado, pero creo que pegaría bien con el traje.

Decidido, salí en busca de una pipa, claro que me quité mi traje primero.

No sé por qué, pero siento como si esto fuera la historia de mi origen.

Dejando eso de lado, me tomó 30 minutos encontrar un lugar en donde vendieran una pipa y todo lo que se requería para encenderla y tal.

Lo compré.

Una pipa de un color marrón similar al de un árbol.

También compré un encendedor, obviamente la pipa no iba a encenderse por obra y magia del señor.

Volví a mi casa y me decidí a probar la pipa.

La puse en mi boca y la encendí.

-¡Cof cof!- comencé a toser, primera vez con el tabaco.

Luego de un rato comencé a tenerle gusto, y finalmente, luego de un rato largo, me acostumbré.

Entre toda mi aventura ya se había hecho de noche, eran las 7:20 más o menos.

-bien, hora de salir- dije y comencé a vestirme.

Seré sincero, esto me pone muy emocionado.

(...)

Me encontraba caminando por la calle vestido como ya les había dicho.

También me puse el brazalete de Beskar en mi antebrazo derecho, las mangas del abrigo lo cubrían para que nadie lo notase.

La gente en la calle habeces se detenía a verme.

The Gamer (Marvel)Where stories live. Discover now