Neoma renació una vez más como una princesa bebé y como la hermana gemela del príncipe heredero. Pero su padre, el imbécil emperador, solo necesita un hijo.
Ella está decidida a cambiar eso, duh.
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♧ Esta historia no me perte...
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"Vi un cuervo antes, princesa Neoma."
Neoma se congeló cuando escuchó lo que dijo Lewis.
En este momento, estaban solos en el carruaje que la llevaría a la plaza Illumina, donde comenzaría el Gran Baile de Navidad.
El emperador Nikolai ya se había adelantado con Sir Glenn y con el Conde Kyle Sprouse para comenzar la ceremonia de clausura con un discurso. Su presencia no era necesaria porque era deber del emperador dar un comentario de apertura y no de ella.
Su trabajo como 'Príncipe Heredero' era dirigir el baile más tarde.
Por esa razón, no se le permitió ir a la plaza con Hanna, su 'cita' y compañera de baile de esta noche. Aparentemente, los caballeros tendrían que esperar a las damas como parte del ritual. Por lo tanto, necesitaba llegar al lugar antes que Hanna.
Y se alegró de que fuera así para poder tener este tipo de conversación con Lewis.
"Un cuervo, ¿eh?" Dijo Neoma después de hacer una pausa por un momento.
"Cuéntame más sobre eso, Lewis."
Por supuesto, había cuervos en el imperio.
Pero su hijo no era tonto. No mencionaría eso si no encontrara extraño al cuervo que vio. Podría haber sido extraño que Lewis se diera cuenta.
"Lo noté cuando la duquesa Amber Quinzel llegó antes", le informó Lewis, sentado en el sofá frente a ella, con su habitual rostro y voz indiferente. "El cuervo también siguió a la duquesa cuando Su Gracia salió del palacio".
"¿Ese cuervo tiene los ojos rojos?"
Sacudió la cabeza. "Pero sentí su energía malévola".
Ella asintió, creyendo completamente en su hijo.
Lewis no era el tipo de persona que soltaba tonterías, después de todo.
Y sabía que él no solo estaba siendo demasiado cauteloso. Estamos hablando de un chico que, después de todo, rara vez habla aquí.
"Quizás el cuervo de ojos rojos está destinado a ser mi vigilancia. Si ese es el caso, entonces es posible que el culto asigne un cuervo diferente a un objetivo diferente", dijo. "Tenemos que tener mucho cuidado ahora, Lewis. Los cuervos son inteligentes. Recuerdan las cosas con claridad y transmiten la información que recopilan a toda la bandada".
Asintió con firmeza.
"¿Hiciste algo cuando viste el cuervo?"
Sacudió la cabeza.
"Tengo la impresión de que se supone que debemos fingir que aún no sabemos sobre el culto. ¿Me equivoco, princesa Neoma?"
"Por supuesto que no", dijo, luego le dio un pulgar hacia arriba. "Buen trabajo."
