Dollhouse (+18) I COMPLETA I

Capítulo 34- El juego I

Especial 4/6

KIM

En cuanto escucho el sonido del silbato, mis pies se mueven automáticamente para correr hacia el bendito papel azul que está incrustado en el árbol. Voy tan rápido que soy la primera en llegar de mi equipo.

Cuando lo tomo con mis manos, le doy una leída lo más rápido posible. Las tareas están enumeradas. Algunas se ven fáciles, otras suenan algo más complejas, y otras simplemente no las comprendo.

-Okey, somos treinta en total. Son cuatro tareas.

-Perfecto. Seríamos unas siete personas por cada tarea.- dice uno de mis compañeros.

-Alto ahí vaquero. Algunas suenan muy complejas y se van a necesitar incluso de más personas- declaro- por ejemplo esta. - la leo en voz alta- buscar en la copa de un árbol, el objeto escondido que los ayudara con la última tarea. Recuerden, los árboles en lo que buscarán, serán los que tengan una marca de su color.- miro hacia el bosque antes de volverme a ellos- Necesitaremos ayuda para subir. Son muy altos.

Comenzamos a discutir sobre lo que hará cada uno dependiendo nuestras habilidades. Pongo mala cara cuando noto que algunos están ajenos a la conversación demostrando que les importa un bledo ayudar.

Nueve chicos se ofrecen a hacer la tarea del árbol y lo agradezco. La verdad es que estos se encuentran con una altura que me quita el aliento. Necesitaría de una escalera para poder llegar a la primera rama. Para ser sincera, también me preocupa un poco. No es que subir a un árbol sea una tarea fácil. En las películas, siempre hay agujeros que los personajes utilizan como escalones para escalar. En nuestro caso, el puto tronco es mas plano que una tabla.

Otro grupo se encarga de la tarea de encontrar las piedras azules. Otro de ordenar una serie libros en la biblioteca de la cabaña de una forma que está explicado en el papel. Y de esa forma nos dividimos cada tarea, intentando que todos nos quedemos satisfechos.

Estoy revisando la lista cuando de repente, un cuerpo impacta con el mio.

-¡Lo siento!- se disculpa un chico rubio.

-¿Estás bien?- lo noto desorientado.

-Sí, es que, no veo muy bien sin mis lentes.

Evito una carcajada. Se ve muy gracioso cuando trata de caminar sin golpearse con algo.

-¿Seguro que podrás andar por ahí en el bosque en medio de la noche?

-Estaré bien.- dice, pero en cuanto se encamina al bosque, se tropieza con una piedra y cae al suelo- Auch.

Inmediatamente corro a él y me agacho a su lado- Joder ¿Te lastimaste?- le pregunto sobando su espalda. Busco su mirada pero la tiene en el suelo, aun recuperándose del golpe en la rodilla.

-Tranquila.- finalmente, sus ojos se conectan con los míos- Guau.- dice y yo entrecierro las cejas.

-Um... ¿Guau?

-Qué hermosos ojos tienes.- suelta haciendo que mis mejillas se tiñen de rojo. El comentario vino de imprevisto y no puedo evitar la sonrisa que se expande en mi rostro.

-Gracias.- digo sincera.

-¿Por qué luces tan sorprendida? Deberías saber lo hermosa que eres.

Me quedo sin palabras- Es que...- jamás alguien me ha dicho algo tan lindo. Ni siquiera Thomas. Carraspeo la garganta- Te ayudo a levantarte.

Le ofrezco mi brazo para que lo tome y así ambos nos incorporamos.

-Creo que esta noche te quedarás conmigo.- digo y eso lo descoloca.