El hijo de Zeus y ¿Medusa? (Harco)

Parte 13

Cuando Harry entró al Olimpo, lo primero que hizo fue ir hasta donde estaba Zeus.

— ¿Qué quieres? — Soltó sin más en su cara.

— Hola, Padre, ¿Cómo estás? — Dijo acercándose hacia Harry. — ¡Hola, Perseo!

— Hola — Dijo mirando los brazos abiertos de Zeus, quien esperaba un abrazo. —, ¿Qué quieres? — Zeus bajó los brazos a sabiendas que su hijo no lo abrazaría. — Dilo rápido, debo ir a por ellos. — Dijo guiando con el mentón hacia abajo.

Zeus negó.

— Déjalos en paz, Perseo. Han tenido suficiente. — Harry frunció el ceño ante lo dicho.

— ¿Qué quieres decir?

— Poseidón, ha venido hasta aquí y me ha pedido que los dejes en paz, son inofensivos y... — El azabache lo interrumpió.

— ¿Poseidón, te ha pedido qué? — Ríe irónicamente.— Quiso ahogarme, creo que hasta quiso ahogar a su propio hijo, dos veces, ¡Dos veces! Creo. — Zeus frunció el ceño.

— Es obvio que Poseidón no haría algo así, por amor a todos los dioses, es mi hermano, el nunca te haría nada. — Se cruzó de brazos y Harry hizo lo mismo.

— Pues creas o no, tu preciado hermano intentó ahogarme. Y yo no estoy intentando asesinarlos. — Levantó una ceja. Zeus igual. — Al menos, ya no.

— Claro, ¿Y qué intentabas? ¿Llevarlos a vivir contigo? — Ríe.

— Pues, obviamente no, pero creo que me enamorado. — Dijo suavemente, mirando sus sandalias.

— ¿De quién? — Agarra una copa de vino que le ofrecieron y cuando estaba a punto de beber, conecta todo. — No, ¡No! — Le grita a Harry. — Perseo, aléjate de él.

— ¿Me vuelves, Hermes? — Miró a su hermano Dios. — ¿O me tiro? — Su hermano lo llevó nuevamente a su carruaje y lo bajó.

— • —

¿En qué momento se descuidaron tanto? ¿Cómo había llegado él, hasta ellos?

Poseidón tenía entre sus brazos a Scorpius, no dejando que se aleje.

— Mi hijo. — Dijo sonriendo.

Draco estaba completamente pálido.

— D-Déjalo ir — Titubeó Draco.

— No te pongas celoso, tu también vendrás conmigo primor. — Dijo sonriéndole en su dirección, pero sin mirarlo a los ojos directamente.

— Por favor, puedes llevarme, pero a él no le hagas nada.

— Es MI hijo, obviamente me lo llevaré.

— ¡Papi! — Gritó Scorpius hacia Draco, intentando safarse del gran hombre que lo tenía presa entre sus brazos.

— Scorpius. — Suspiró preocupado. — Suéltalo — Dijo Draco una vez más, tratando de sonar autoritario. Pero Poseidón se rió en su cara.

— Ha dicho que lo sueltes, pedazo de mierda. — Dijo Harry detrás de Draco, acercándose hacia ellos.

— ¡Perseo! Tanto tiempo, mi no tan querido sobrino. — Sonríe socarronamente. — ¿O debería decir semi-sobrino? — Rió.

Harry desenvainó su gran espada hacia Poseidón.

— He dicho que lo sueltes, imbécil. — Zeus frunció su ceño.