Un Esquinazo, Un Placaje Y Un Encapuchado Corriendo

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Os dejo un vídeo por si queréis escucharlo mientras leéis. Está en Dovahzul, el idioma dragoniano de Skyrim. Es lo que suelo escuchar para inspirarme. :D

Y como de costumbre, me disculpo por la espera, aunque hay muchos autores que tardan mucho más que yo en subir los capítulos. Tardaré en subir los siguientes, no voy a dejar esta historia congelada sin avisar, os lo aseguro. ¡Disfrutad de la lectura!

A la mañana siguiente, ni Anás ni Dov habían dormido. Anás porque no se fiaba de que Cloe se volviera loca y Dov porque no quería dormir mientras Cloe estuviera despierta y ésta no durmió esa noche.

-Cloe: ¡DESPERTAAAAAD ESTAMOS PERDIENDO TIEMPO DE QUEMAR COSAS! -Escandalizaba a las 7 de la mañana.- ¡VAMOS!

-Dov: ¿Puedes callarte un poco? Algunos no hemos dormido mucho últimamente.

-Drag: -Se incorpora del sueño.- Te va a costar callarla, Dov.

-Dov: He oído un reto y un reto tengo que cumplir.

Dov hace un movimiento con la pata delantera derecha y un trozo de tierra entra por la puerta y le tapa la boca (pero no la nariz) a Cloe.

-Cloe: ¡*sonidos sin sentido*!

-Dov: Me debes una cabra entera. -Igual que los humanos dicen "Te debo una copa"  (o variaciones), los dragones dicen esta expresión. La alimentación de los dragones fantásticos es famosa por ser como la de los dragones de komodo, que engullen sus presas enteras y vivas.-

-Drag: Si quieres desayunar cabras montesas, hay un montón por los alrededores.

-Dov: Eso sí es una razón para levantarse. -Se pone en pie.- Pero, Cloe... -Le quita la tierra de la boca.-

-Cloe: ¿Sí?

-Dov: Deja dormir a Anás, por favor.

-Cloe: Intentaré intentarlo.

Dov sale por la puerta, sin abrirla porque ya se ha caído del todo, y nada más salir ve a lo lejos un grupo de cabras escalando por una pared vertical. Todavía no ha salido el sol, así que las cabras no ven al sigiloso dragón rojo acercarse. En cuanto Dov está debajo de las cabras, escala poco a poco sin hacer ruido y empieza a engullir cabras, una detrás de otra, sin que el resto lo vean. Después de comer 4 cabras se vuelve otra vez a la cabaña.

Cuando se aproximaba a la cabaña, escucha a Anás en su mente.

-Anás (pensando): Dov... ¿Podemos irnos de una vez?

-Dov (mente de Anás): ¿Y cómo damos esquinazo a la loca?

-Anás (pensando): ¿Y si salimos volando mientras la loca está "evaporando" huevos de nidos al azar?

-Dov (mente de Anás): Pero con Drag, pobrecillo.

-Anas (pensando): Díselo tú, que no nos escuche la bala perdida.

-Dov (mente de Anás): ¿La bala perdida?

-Anás (pensando): Es que siempre la llamamos igual... no tiene sentido.

-Dov (mente de Drag): Drag, no preguntes pero puedo leer la mente y hablar por los pensamientos. Vamos a salir volando y huir de Cloe, ¿vienes?

-Drag (pensando): Por supuesto.

Drag y Anás salen sigilosamente de la casa y se preparan. Anás usa su hechizo y al mismo tiempo Dov y Drag despegan. Salen los tres volando a mucha velocidad, y al cabo de un rato escuchan a Cloe gritando.

-Anás: Nos hemos librado de una buena...

-Drag: Y que lo digas.

Viajaban volando por encima de los árboles en busca de algo que les indicase que el castillo de la OPBI no andaba lejos. Alguien en la superficie los vió.

-????: Me suena de algo el color de ese dragón. Vamos, Rekenkail. -Dijo el humano a un dragón a su lado, con una voz algo aguda.-

El humano encapuchado se movió ágilmente entre los árboles muy lejos del dragón, que no se inmutó del sitio. Entonces, la silueta hace una señal y el dragón, Rekenkail, despega a mucha velocidad e intercepta a la perfección a Dov, cayendo muy cerca de donde estaba la silueta.

-????: Me suena tu cara. ¿Eres algún maleante? -Dijo una voz femenina.-

-Dov: ¿Qué? Claro que no. ¿No sabes quién soy?

-????: Te he visto alguna vez. Seguro que ha sido en la lista negra de la... organización del bosque.

-Dov: ¿De la OPBI?

-????: ¿Cómo sabes ese nombre?

-Dov: Soy miembro, de por vida.

-????: ¿Un dragón anclado de por vida a algo? Imposible. Dime quién eres y no te haré nada.

-Dov: Mi nombre es Dovarokerah. Altidad de Heme.

-Rekenkail: No es posible. Se muroreó en su momento en el bosque que había muerto.

-Dov: Estuve muy débil durante mucho tiempo por muchos motivos.

Rekenkail era un dragón macho de color rojo mucho más oscuro que el rojo de Dov. Sus cuernos y otros detalles eran de colores dorados. Era un dragón muy serio y le faltaban algunas escamas.

Entonces aterriza Drag detrás del dragón Rekenkail. Anás baja al suelo después y se coloca detrás del humano, que está encapuchado todavía.

-Dov: Y ahora que se han cambiado las tornas, facilítanos tu nombre.

El humano encapuchado se quita la capucha y deja ver su cabeza. Es una mujer joven, de unos 20 años, de un largo pelo castaño.

-????: Mi nombre es Launurad. Y que sepáis que denunciaré, a los altos cargos de la OPBI si es necesario, que un loco se hace pasar por el honrado padre del rey de Heme.

-Dov: No puedo demostrarte la veracidad de eso, porque igualmente un mago podría hacerme pasar por Dovarokerah.

-Launurad: ¿Y qué hacíais aquí volando?

-Anás: Escapar de una chiflada.

-Dov: ¿Nos podéis llevar al castillo?

-Launurad: ¿Acaso quieres infiltrarte, impostor?

-Dov: Pensaba que los humanos eran los únicos enemigos de la OPBI.

-Launurad: Os llevaremos, pero con una condición. Iréis atados de todas las patas.

-Anás: Mejor, menos caminar.

-Drag: Conforme.

-Dov: Aceptamos las condiciones.

Palabras De Dragón 2: El Amanecer De SangreWhere stories live. Discover now