𝐎𝐮𝐫 𝐫𝐞𝐚𝐥𝐢𝐭𝐲 » myoui mina.

THREE

Sharon desapareció apenas T/n estuvo respirando tranquilamente. La peli negra estaba molesta ahora, ¿por qué la castaña había desaparecido?

— ¡Yo te recuerdo! — gritó intentando dar con la chica.

Salió del lago y camino un poco al ver a la mariposilla, la siguió sabiendo que ella la llevaría al lugar correcto. Se detuvo al notar árboles altos y una voz tarareando, adentro su cuerpo entre las ramas.

Se mantuvo inmóvil al notar a la misma chica del vagón, a la misma chica que robo su corazón en su anterior vida y la promesa la golpeo fuertemente.

— Lo cumpliste — dijo la rubia.

La de pelos dorados bajó de dónde estaba y camino al amor de su anterior vida, rodeó su cintura, escondió su propio rostro en el cuello de la alta disfrutando el aroma que emanaba. Lavanda.

— Lo recuerdo todo — habló sin creerlo — recuerdo cada día que vivimos, recuerdo lo infeliz que fui y soy sin ti en mi día a día — relató la peli negra.

— No puedo creer que te siga amando aún siendo otra persona — la rubia se abrazo aún más — Te amare en todas mis vidas — narró la rubia.

— También yo lo haré, Sharon podría amarte en todas mis vidas — afirmó T/n.

Una risita suave produjo un cosquilleo en el estómago de la peli negra.

— Mi nombre es Minatozaki Mina — corrigió.

— ¿Mina? Tú nombre es tan lindo cómo toda tú, yo soy Wang T/n — se presentó también — Es un placer volver a conocerla en está vida — concluyó.

Las mejillas de Minatozaki estaban coloradas, se apartó del abrazo y sus ojos brillaron al notar una cabaña de madera al fondo.

— Debemos entrar ahí — chilló emocionada.

Wang asintió, tomó la mano de la rubia y caminaron por un sendero de flores hasta el inicio de la cabaña, al entrar su expresión fue de total sorpresa.

— ¡Esto es totalmente lindo! — gritó Mina sin esconder su emoción.

— Realmente es lindo, pero, ¿sabes que es más lindo? — habló T/n abrazándose a la cintura de la más baja.

— ¿Qué es aún más lindo? — siguió Mina, aceptó el abrazo gustosa.

— Tú eres aún más linda, el rubio te queda muy bien.

— ¿Dices que el castaño no era mi tono? — gruñó la rubia.

— Creo que no lo era — bromeó la alta.

— Idiota — masculló la rubia.

— ¿Cómo me llamaste? — cuestionó la alta.

Mina giró su cuerpo encarando a la otra, con una sonrisa en los labios volvió a hablar.

— Te llame idiota, ¿harás algo al respecto o seguirás observándome con cara de tonta enamorada? — dijo.

— Quizás podría hacer algo — correspondió.

Una risita salió de los labios de Mina sabiendo que en realidad su compañía no podría hacerle ninguna maldad, conocía su puro corazón.

Mina se levantó en puntillas y dejó un besito suave en los labios de su mayor.

— Lo necesitaba — confesó Wang.

— También yo lo hacía, pero hay muchos más de dónde vino ese — jugueteó la pequeña.

T/n unió sus manos y tras ella sentarse sobre un sillón subió a la rubia a ahorcajadas en sus piernas, Mina rodeó su cuello acariciando la parte trasera de su cabeza.

— Debemos disfrutar esto, ¿que quieres hacer primero? — inquirió T/n.

— Podríamos jugar en el lago, darnos un baño ahí quizás — sugirió la menor.

— Minari pero no tenemos más ropa, ¿será posible tomar un resfriado? — cuestionó con confusión la mayor.

— ¿Necesitamos ropa?

Y ese fue el fin de T/n.