• Capítulo 27 •

3.9K 345 331
                                    

Este capítulo va dedicado a LaMasRebelde , te leí súper entusiasmada por el libro, así que te lo dedico, espero y te guste.

•••

†Malyk Valter†

Aurora está horrorizada con la información y la comprendo totalmente, yo tampoco me la creería.

No pensé que este momento llegaría tan pronto. De hecho, teníamos planeado presentarme justo cuando diéramos con el paradero de Mylos, mi mellizo.

Somos totalmente iguales, pero a la vez no. Es decir, físicamente somos extremadamente parecidos, pero tenemos ligeras diferencias, por ejemplo; yo tengo pecas, estoy más fornido, mi clavicula es más cuadrada y definida y mis ojos son grises casi transparentes. Los ojos de Mylos son grises verdosos.

En personalidades somos totalmente diferentes. Yo soy más decidido, el más decisivo. Yo soy más impulsivo, el más retraído. Yo soy más sinvergüenza y el es más culto. Yo soy más maníaco y el más miedoso. Yo estoy mal y el está bien.

Siempre ha sido así. Me detectaron Psicosis de muy pequeño, siempre veo alucinaciones como si estuviera hasta las trancas de drogado. De pequeño mi mamá noto mi comportamiento, me notaba muy alterado, nervioso y en algunos casos me veía llorando hablando solo. Inmediatamente acudió a un psicólogo.

Las primeras terapias fueron normales, primero pensó qué tenía depresión, después dijo que sufría de ataques de ansiedad y por ultimo dijo qué no me vería más, que eso lo tenía que tratar en psiquiatría.

Nos recomendó a un amigo de el, que poco a poco se fue volviendo amigo mío.

Hasta qué en una de las alucinaciones qué tuve, lo asesine. Era mi mejor amigo, yo tenía 8 años y el tenía 56, pero nos contábamos de todo y realmente me sentía a gusto con alguien a quien por fin podía contarle mis cosas.

Mi familia nunca entendió mi enfermedad, con ellos no conté nunca, mi madre me veía con lastima y tristeza, siempre trataba de animarme pero no me sentía completo. Mi padre siempre se mantenía en su oficina trabajando y Mylos siempre fue diferente a mi en todos los sentidos.

No me mal entiendan, adoro con mi vida a Mylos, somos hermanos a pesar de todo.

Cuando asesine a mi mejor amigo, me aisle de todos, empecé a sufrir depresión y me arañaba y cortaba con ojillas mis brazos. Intente suicidarme dos veces, lanzarme por el balcón y ahogarme en la bañera.

Pero Mylos siempre venia a rescatarme y en estos momentos tengo que rescatarlo a el, siento que se lo debo.

Cambiamos de colegio y nos mudamos a una nueva ciudad, donde vivíamos con mi tío Luigi, quien rápidamente nos permitió acudir a el, vivíamos en la misma casa todos juntos.

Nos inscribimos al prestigioso colegio del pueblo Aralicia, mis padres borraron mis antecedentes pero Luigi me descubrió mi enfermedad.

El no me juzgó. De hecho, me ayudo a usar mi enfermedad a mi favor. Me enseño a asesinar.

Asesine a las personas que le debían plata y nunca se dignaban a pagarle a Luigi. A tan corta edad de ocho y nueve años acababa con vidas, pero seguía sin sentirme libre.

Seguía sufriendo ataques de ansiedad y depresión, cosa la cual no podía controlar nunca, seguía cortando mis pieles con cuchillos, me mordía las uñas y arrancaba mis cabellos en llantos que duraban horas.

Para calmar mis llantos, Estela siempre salía con nosotros; con Heros, Eder, Ludovica, Prella, Mylos y yo, para distraernos. Nos llevaba a parques de diversiones, a patinar en hielo, a carreras de caballos, pero un día dijo qué donaría un dinero a unas grandes personas.

Los Canavarlar [Klanlar #1] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora