2. Solo hay dos opciones: tú los golpeas o eres golpeada

14 4 0
                                    

El increíble Palacio Santo en donde nos encontramos tiene una pequeña particularidad: toda su queridísima estructura tiene runas neutrales esculpidas. Esto quiere decir que está literalmente vacío, nada posee energía, ni se puede llenar o modificar; por lo que la magia en su interior es limitada. Es igual a poner una vela en el interior de una cúpula de cristal: una vez que se acaba el oxígeno, la llama moriría y sería igual para nuestra magia si estamos con las puertas cerradas y un montón de espectros absorbedores de energía.

Tiene mucha lógica sin importar desde donde se mire, para variar estoy siendo inteligente. Bien, muy bien.

Ahora, solo debo convertir este edificio en una cómoda y atractiva jaula para espectros, encerrarlos, dejarlos devorarse entre ellos y dejar que otra persona se encargue de la cosa horrorosa y super fuerte que saldría como último vencedor.

Excelente plan.

Con rapidez, escribí varias runas en tres conjuntos diferentes, la sangre brilló con energía mágica antes de tatuarse en la pared y selló la tríada. Después, dibujé un círculo de transmutación y coloqué la piedra que me estaba protegiendo en el centro. La idea era lograr amplificar mi magia y atraer a todos los espectros de los alrededores. De cierta forma, sentí como si me colocara un anuncio en mi pellejo de: "Mírenme, una apetitosa y débil princesa está aquí, vengan a devorarme, cabezas huecas". De solo pensarlo me estremecí. Lo mejor sería irme cuanto antes.

Me di la vuelta de forma brusca y no pude evitar marearme. Quise controlar mi respiración en vano, parecía que la fatiga, la pérdida de sangre y el estar tensionada me estaban cobrando la factura. Antes de entender mi situación por completo, ya me había caído al suelo y miraba todo de forma desenfocada y con bruma negra.

Oh no.

¿En serio tenía que sentirme mal justo ahora?

Mordí mi labio y mis ojos picaron con las lágrimas retenidas.

Llegado a este punto solo me quedaba esconderme hasta recuperarme, aunque no sabría si funcionaría.

Sin control en mi cuerpo, solo pude arrastrarme a la seguridad del edificio; incluso si se iba a convertir en una jaula de monstruos, era preferible quedarme en una habitación segura a moverme por ahí. Me apoyé en el suelo y casi gateando entré a la primera puerta que vi y la cerré. Por la ventana pude ver como una marea negra deformada de espectros avanzaba a alta velocidad hacia mi posición. Fruncí el ceño e intenté recomponerme sin éxito.

Mierda, ¿qué hago ahora?

Me acosté en el suelo y levanté los pies contra la puerta para recuperarme. Podría morir en cualquier momento, pero por lo menos la estructura estaba vibrando y emitiendo un leve brillo como señal de que la conexión entre las runas se sincronizó con éxito. Pronto, todo el lugar estaba lleno de energía mágica haciéndolo pesado y sofocante. Ya podía suspirar aliviada, mi plan había funcionado.

Aproveché para recargar mis artefactos mágicos mientras cerraba los ojos y me concentraba.

Según los antiguos registros reales, las runas de este lugar no son solo para evitar influencias mágicas desconocidas y para hacerlas indestructibles, también son controlables como el esqueleto de una bestia gigante protectora de la familia real. No obstante, la habilidad para controlarla fue pérdida cuando la enseñanza popular de las runas se consideró un tabú por su potencial y fue castigada con la muerte.

Obviamente, a algún antepasado mío, egoísta y de visión corta, decidió monopolizarla y estancó su investigación por muchos años. Mi padre quiso encontrar esta habilidad y gastó mucha mano de obra para equipar grupos de élites para que la estudiaran en secreto, pero ¿cómo podría salvar registros que fueron quemados en venganza por su prohibición y luchar contra algo que se convirtió en heregía con el tiempo?

Lotte y la Torre del CuervoWhere stories live. Discover now