Cap 12

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Ya era demasiado tarde, aproximadamente las 2:00 de la madrugada, su padre ya le había llamado, le contó sobre una nueva amiga que hizo en su nuevo trabajo, le encantaba que volviera a ser feliz. Seguía jugando a la play cuando escuchó la puerta abrirse muy rápido logrando azotarla, se asustó un poco pero no le dio importancia hasta que escuchó un grito, le angustio, aunque detestaba a su madre no quería que le pasara nada, salió de su cuarto y entró a la sala donde se escuchaban los gritos. Era el hombre desconocido...pero estaba muy borracho. Habían prendido todas las luces de la casa.

-Hola?- Entro a la cocina, ahí se encontraba su mamá, que también estaba ebria.

-Luzuuuu Cariño- Se acercó a él pero el castaño se alejó de inmediato. Solo bajo a ver qué ella estaba bien, no quería ningún tipo de afecto y menos si estaba borracha.

-No me toques...ya me voy.- salió de la cocina encontrándose con Edgar y su aliento a alcohol

-Hijo de puta- Lo tomó de la muñeca, luego lo empujó haciendo que se estampara contra la pared. ¿Que coño estaba haciendo?

-Déjame en paz idiota.- Estaba asustado pero no lo iba a dejar verlo indefenso.

-Idiota?Calla mocoso inútil- Lo golpeó, no fue un golpe despacio, para estar borracho golpeaba con demasiada fuerza.

-Acabas de golpearme?! Creo que te espera una buena celda en la cárcel.- Tocó con suavidad la mejilla en la que le había dado el golpe

-Como? Crees que puedes demandarme? Maximo me meterán unos meses a la cárcel, cuando salga te haré todo el daño que yo quiera. Si me demandas, yo te haré la vida imposible.- Le dio otro puñetazo -Nadie le va a creer a un niño tonto!- le dio otro golpe -Yo soy el hombre de aquí!- Lo agarro y aventó al suelo -Yo mando en esta casa!- Lo patio tres veces,por suerte no le rompió una costilla -Yo te puedo hacer todo lo que yo quiera!- Lo levantó y le dio otro puñetazo. Luzu tenia toda la cara llena de lágrimas pero solo caían, el no emitía ningún sonido de llanto, solo de dolor, cada golpe dolía más.

-Véte al infierno.- Edgar lo soltó y luzu no desaprovechó eso agarrando un florero de cristal, lo golpeó con el haciendo que se destrozara en pedazos, Edgar se quejó atrayendo la atención de su madre que salió de la cocina.

-LUZU! QUE LE HAZ HECHO?!!- Corrió hacia el hombre.

-¿¡QUE LE EH HECHO!?- Puso una mano en su abdomen, le dolía demasiado.

-LARGO! VETE!!- ¿QUE DICE ESTÁ LOCA? Luzu salió de su casa y corrió con todas sus fuerzas.

Llego a un parque y vio un poste, se recargó en el, luego recargó su espalda y se sentó, le habían dado una paliza y su madre no hizo nada, lo peor es que el hombre tenía razón, ¿Quien le iba creer a un adolescente que estaba pasando por el divorcio de sus padres?
Nadie. Tenía tanto miedo de no poder salir de toda esta situación de mierda, no pensó en qué Edgar pasaría a más, pero ese era su problema, no pensaba en el futuro y sus consecuencias, solo se lanzaba a ciegas. Cuando estaba a punto de quedarse dormido escuchó a lo lejos "LUZU!?" Era la única voz que lograba hacerlo feliz, Auron.

Despertó en un cuarto, le calaba la luz, volteó a ver hacia una ventana cuando sus ojos se habían acostumbrado, noto que todavía no amanecía lo que significaba que no había dormido tanto.

-Buenos días bello durmiente...- Entro Auron y se sentó en la cama

-Hola Auron...- Iba a matar al idiota de Edgar.

-¿Tienes hambre? Son las 6 de la mañana...

-Si...quiero comer...

-¿Que quieres comer?- pregunto con una sonrisa pícara

-A ti y un sándwich- Ambos rieron, eran los tipos de chistes que siempre hacían

Fueron a la cocina, era muy bonita tenía mucho cristal y demasiado elegante. Auron tomo un plato, los ingredientes para el sándwich y comenzó a prepararlo. Luzu vio un gran espejo y se acercó tenía muchos moretones, se levantó su playera y observó el vendaje en su estómago, le dolía todo su cuerpo. Todavía no podía creer que Edgar llegara a tanto y que su mamá en vez de protegerlo lo echara, era algo insensible.

El azabache se acercó al castaño, viendo su cara lastimada de confusión y tristeza, le dolía tanto que Luzu sufriera.

-Te hicieron mucho daño...¿Quien fue?

-El prometido de mi madre.- A Auron le sorprendió, ese infeliz lo iba a pagar si lo volvía a tocar. -Yo lo resolveré...- Volteó a ver al pelinegro, este se acercó a él, demasiado cerca.

Le tocó sus vendajes que él había hecho, había visto el abdomen del castaño pero era diferente, antes parecía alguien sin vida y ahora estaba ahí frente a él, tocó sus vendajes para luego dirigirse a su mejilla y acariciarla con cariño, no sabían lo que pasaba pero tampoco lo querían detener, Luzu se acercó más a él, tomó su mejilla y la acarició con el mismo cariño.

-¿Esto no será incomodo?- Auron no quería arruinar su amistad

-Espero que no- Y lo beso, el beso fue muy dulce, con cariño. Luzu sintió esas mariposas que nunca había sentido, sentía nervios pero a la vez tan confiado pero tan asustado, esto era enamorarse y no tenía dudas de que se estaba enamorando. Se separaban y se volvían a unir, Auron paso sus manos rodeando la cadera de luzu y él castaño rodeó su cuello. Duraron varios minutos que parecieron sólo segundos, se separaron mirándose con esa mirada tan de ellos, respiraban agitados.

-No era mentira cuando me dijiste que me querías comer a mi- dijo Auron coqueto a lo que Luzu río

-Tampoco era mentira cuando te dije que quería un sándwich

-Pero yo soy mejor que un sándwich..¿Cierto?

-Bueno...no quiero herir tu ego

-Nadie puede hacerlo.- Lo beso de nuevo.

Auron sabia que era bisexual. Luzu no sabía ni en qué calle vivía pero no le importaba salir con un chico, si ese chico se llamaba Auron, por el, perfecto.

Se besaron unas cuantas veces más, luego fueron por sus sándwiches y se sentaron en la sala viendo una película era bastante mala pero lo que les gustaba era la compañía del otro.




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First // LUZUPLAY <3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora