3-PRISIONERO

457 53 8
                                    

no sabia que pasó, su mente estaba en blanco, solo podía sentir el frío suelo en el que estaba acostado, su conciencia fue volviendo gradualmente hasta que pudo abrir sus ojos en busca de saber dónde estaba pero aun veía borroso, se levantó un poco con sus brazos tratando de encontrar una sola pista para saber dónde estaba, observando cada vez más a su alrededor que estaba en una prisión krang

-¿co...co...cómo llegué aquí? -se preguntó así mismo repasando sus recuerdos una y otra vez hasta que la respuesta llegó como una gran ola de recuerdos

alguien lo había dejado inconsciente y lo trajo ahí pero ¿quién fue?, solo recordaba que ese mutante dijo un numero, estaba confundido, no podía analizar su situación con los pocos datos que recolectó de su memoria, se puso de pie torpemente pues el efecto del somnífero que le fue inyectado aún no había pasado totalmente, toco su rostro notando que no tenía su antifaz, asustado se revisó completo, no tenía sus armas ni su equipo, miro a todos lados con la esperanza de encontrar su equipo pero al dar un paso terminó boca abajo en el suelo, se quejo e intentó levantarse pero escucho a alguien acercarse por lo que se quedó quieto esperando a que se fueran

-espero que le hayas quitados las armas, digo, no tengo problemas con las armas pero no es mi fuerte, mi somnífero debe de haber adormecido sus músculos pero no se si resulte tan bien como en mis sujetos de prueba -soltó una risa nerviosa- puede atacarte si le doy el antídoto para que despierte completo -pareció hablarse así mismo

-krang dice que te apresures -habló la tan reconocible voz de un kraang droid

-si, si, ya se -abrió la puerta- mira eso, está despierto -miro a Leonardo con mucha intriga

Leonardo se puso de pie fulminando a ese mutante con la mirada, no sabía sus intenciones pero era obvio que no eran buenas, se puso como pudo en guardia como un vago intento de mostrar superioridad, el mutante gato solo miro con incredulidad al joven tortuga soltando un risa burlona como todo un arrogante

-¿Qué edad dicen que tiene? -pregunto señalando a la tortuga sin borrar su sonrisa

-la conocida como tortuga también conocida como Leonardo Hamato tiene 15 años -contestó uno de los krangs que acompañaban al felino mutante

-¿15? -se mostró sorprendido- es joven, supongo que aguantara unos días -se acercó a Leonardo para observar mucho mejor- el efecto de somnífero fue tan mediocre como creí -lo observo de pies a cabeza

Leo retrocedió con desconfianza chocando contra la pared siendo acorralado por el felino y los krangs, el joven tortuga no se dejaría dominar tan fácilmente por lo que intento atacar al felino pero solo logro que el susodicho lo lanzaran al suelo con una ridícula facilidad

-patético -rio un poco hasta que noto que los krangs iban a atacar a la tortuga- esperen, déjenmelo a mi -se agacho para ver a Leonardo

-¿qué quieres de mí? -pregunto aun débil forzando un poco su garganta

-yo nada, pero es mejor que cooperes a menos que quieras morir -le aconsejo para después ayudarlo a levantarse

Leo no podía negarse, dejo que ese felino lo sacara de la celda y lo llevara a quien sabe donde mientras los krangs los seguían eso lo ponía mucho más nervioso de lo que ya estaba, el felino noto que el adolescente estaba muy alterado, no le sorprendía en lo absoluto y lo dejó saber con sus expresiones que habían pasado de ser burlonas a ser extremadamente serias

-oye tranquilo te dolerá un segundo y después ya no recordaras nada -le explico con un neutro que ocultaba demasiado bien las intenciones de esas palabras

-¿eso se suponía que debía calmarme? -pregunto sintiendo cómo poco a poco iba recuperando su fuerza

-tómalo como quieras -se mantuvo neutro en todo momento

El felino llevó a Leo hasta una habitación donde lo amarró con fuerza a una especie de camilla, un krang se acercó con un fierro caliente como el que usan para marcar a las vacas pero ese tenia el numero infinito que ya estaba ardiendo al rojo vivo, Leonardo al ver aquel fierro comenzó a asustarse y mover las piernas por dicho miedo

- !!no por favor!! -grito tratando de zafarse de la camilla pero cuando menos lo espero el metal al rojo vivo ya estaba quemando su piel ocasionándole un dolor terrible que no podría describir

mientras el joven tortuga gritaba por él dolor insoportable aquel mutante felino solo observaba cruzándose de brazos

- marica -dijo con una expresión seria esperando que ese horrible escenario terminara pronto.

*

*

*

*

Garra de tigre iba llegando a la azotea donde se reunía con Leonardo pero no encontró al susodicho ahí solo encontró el antifaz tirado en el suelo que parecía luchar para que el viento no lo arrastrarse, se acercó y lo tomó entre sus patas contemplándose por un segundo

-¿cachorro? - miro hacia todos comenzando a buscarlo con mucha preocupación mientras apretaba el antifaz en su pata

Garra de tigre comenzó a olfatear él antifaz para buscar el rastro del adolescente sin realmente tener éxito por el olor a cloaca que esa prenda desprendía, cuando levanto la mirada vio algo que brillaba reflejando las luces de la ciudad, se acercó para tomarlo, era una medalla con el número 17 escrito, rápidamente dedujo de donde venía pues el olor que desprendía era vagamente familiar pero a la vez desconocido como si no hubiera percibido ese olor a azufre y a químicos en mucho tiempo, iba a seguir buscando al joven tortuga de no ser que vio tres sombras acercarse, rápidamente dedujo de quienes se trataban

-te voy a encontrar cachorro -hablo al aire esperando que este arrastrara sus palabras y las llevará hacia Leonardo, dejó el antifaz atorado en una varilla para después irse con la medalla, lo único que necesitaba para saber dónde estaba

A la distancia tres hermano peleaban buscando a su hermano mayor por órdenes de su padre que ya estaba preocupado por la larga ausencia de su heredero

- ¿Tienes que gritarlo en la cara?, ¿no sabes lo que es la prudencia? -pregunto Donnie con fastidio culpando a Raphael de lo que estaba pasando

- !!no actúes como si te importara, hasta yo se que también lo quieres lejos!! -le gritó Raphael todavía muy molesto

-chicos, dejen de pelear, hay que buscar a Leo -hablo Mikey muy preocupado por su hermano mayor

Los tres llegaron a esa azotea para descansar un momento sintiendo que perdían el tiempo en buscar a su hermano mayor pues pensaban que Leonardo volvería mucho más tarde para no verle la cara

-volvamos a la alcantarilla, que Leonardo vuelva cuando se le dé la gana -refunfuño Raphael harto de que le estén dando órdenes

-de acuerdo, tu dile al maestro Splinter por que nos regresamos sin Leo -rodo los ojos mientras buscaba un lugar donde sentarse

-chicos... -hablo Mikey llamando la atención de sus hermanos

Los otros dos adolescentes voltearon a ver a su hermano menor el cual aguantaba sus lágrimas sosteniendo el antifaz de su hermano mayor

-¿qué pasa Mikey? -preguntó Donnie

-es el antifaz de Leo -se los mostro- ¿por que se quitaría su antifaz y lo abandonaría? -parecía no procesar el momento

Los otros dos hermanos solo miraron atónitos el antifaz temiendo lo peor.

ZAFIROWhere stories live. Discover now