La nueva "Humanidad"

Un nuevo humano

Jair trató de ordenar sus pensamientos, analizó lo mejor que pudo todo lo que sabía hasta ese momento.

—Veamos, el mismo día que inició el experimento fui a dormir y después desperté aquí, en un lugar que no conozco y afuera hay varios muertos, probablemente por disparos, pero unos cuantos parecen haber muerto de otra cosa.

Dirigió su mirada al USB de su mano—Los muertos tienen el uniforme de la gente que me estudiaba, es muy probable que sus muertes estén relacionadas con el estado de mi cuerpo.

Guardó la USB en la bolsa del rasgado pantalón que tenía puesto, se armó de valor y salió a donde estaban los cadáveres, se acercó a uno, el más cercano, el cual era uno de los que tenía esa extraña herida, revisó su ropa y encontró un celular, trató de prenderlo varias veces, pero no sirvió de nada—No tiene batería —Siguió buscando en los otros cadáveres y era lo mismo, al final decidió tomar las identificaciones de cada uno, por lo que vio al llegar eso le ayudaría a tener acceso a ciertos lugares.

Revisó el lugar con la mirada, no había mucho, así que centró su atención en las dos puertas a ambos lados de la habitación, Jair no conocía el lugar, no sabía por dónde ir así que sería a la suerte. Decidió ir a la derecha, al tratar de abrirla se dio cuenta de que estaba cerrada, y parecía tener una cerradura común, así que las identificaciones no le servirían. Hizo un poco de fuerza para abrirla, lo que no esperaba era que de golpe la puerta se desprendió de la pared, además la cargaba sin ninguna dificultad.

Nuevamente intentó tranquilizarte lo mejor que pudo, el ruido al desprender la puerta fue muy fuerte, así que la bajó con mucho cuidado, evitando lo mejor que pudo hacer más ruido, después vio lo que había detrás, un largo pasillo completamente oscuro, y al final de este una pequeña luz, parecía ser del sol.

—Sí, creo que ya me morí —Hacer ese tipo de comentarios por alguna razón lo relajaba, aunque no lo suficiente. Decidido avanzó a paso lento y con mucho cuidado.

Llegó al origen de la luz, una habitación completamente vacía, la cual tenía bastantes ventanas en la parte alta, a juzgar por la posición del sol, había amanecido hace poco tiempo. Se acercó a la pared, la ventana era muy alta, pero Jair recordó lo que hace un momento ocurrió con la puerta.

—Quizá... —Se preparó y dio un ligero salto, no alcanzó la ventana, pero llegó mucho más arriba de lo que esperaba, una vez en el suelo se preparó para volver a saltar, un poco más fuerte, logrando así aferrarse a la orilla de la ventana, lentamente se asomó para enseguida bajar, tratando de ocultarse.

Afuera del edificio había una gran cantidad de soldados, policías y más gente que no sabría identificar. Solo vio un segundo afuera, pero se dio cuenta el edificio había sido completamente cerrado y aislado.

—¿Qué está pasando? —Ya eran demasiadas cosas que procesar, pero se le ocurrió algo, si podía conectar la memoria USB a alguna computadora quizá entendería lo que pasaba, después de todo debería tener las respuestas, aun así, seguía preguntándose—¿Respuestas a qué? —Podría ser a los muertos de antes, a la gente afuera del edificio o al estado de su cuerpo, él simplemente rezaba porque fuera a todo eso.

Se quedó pensando un momento, no sabía el lugar donde estaba exactamente, pero sabía que ya no estaba bajo tierra, de echo estaba en uno de los pisos de más arriba, recordaba de cuando llegó que el edificio solo tenía siete pisos, y por lo que vio al asomarse, estaría en el quinto aproximadamente.

«Lo primero es buscar una computadora» Siguió avanzando por el pasillo para buscar alguna, después de un rato llegó a una puerta, la cual solo se habría de un modo. Acercó una de las identificaciones a un sensor justo al lado, esta fue escaneada y se encendió una luz verde, enseguida la puerta se abrió.