slugs

2.2K 342 3
                                    

Los días siguientes, Eryx no había visto mucho a Harry, Hermione y Ron, estaba demasiado ocupado arreglando su habitación, cuidando a Gea y a Febe, y terminando sus trabajos. Eryx caminaba detrás de Gea la cual se dirigía al campo de Quidditch. Eryx sabía que era bueno en aquel juego, pero no era de su agrado jugarlo. Se entero por Oliver Wood que los de Gryffindor iban a entrenar, así que decidió ir a ver a Harry entrenar pues nunca a ido a ninguno de sus juegos.

Al llegar se encontró con los de Slytherin frente a los de Gryffindor, Gea caminaba con elegancia posicionándose a un lado de Harry. Al acercarse, A su lado llegan Hermione y Ron con rapidez a ver lo que sucedía.

—¿Qué ha ocurrido? —preguntó Ron a Harry—. ¿Por qué no juegan? ¿Y qué está haciendo ése aquí?— Miraba a Malfoy, vestido con su túnica del equipo de quidditch de Slytherin. 

—Soy el nuevo buscador de Slytherin, Weasley —dijo Malfoy, con petulancia—. Estamos admirando las escobas que mi padre ha comprado para todo el equipo.

Eryx entendía el por que Draco se encontraba tan feliz al inicio del año, había conseguido entrar al equipo de Quidditch de Slytherin gracias a su padre, ahora podía comprender las actitudes del chico recientemente. Ron miró boquiabierto las siete soberbias escobas que tenía delante. 

—Son buenas, ¿eh? —dijo un  Malfoy con sorna—. Pero quizás el equipo de Gryffindor pueda conseguir oro y comprar también escobas nuevas. Podríais subastar las Barredora 5. Cualquier museo pujaría por ellas— El equipo de Slytherin estalló de risa. 

—Pero en el equipo de Gryffindor nadie ha tenido que comprar su acceso—observó Hermione agudamente—. Todos entraron por su valía. 

Del rostro de Malfoy se borró su mirada petulante.—Nadie ha pedido tu opinión, asquerosa sangre sucia —espetó él. 

Sus palabras provocaron de repente una reacción tumultuosa. Flint tuvo que ponerse rápidamente delante de Malfoy para evitar que Fred y George saltaran sobre él. Gea le suelta un gruñido a Malfoy mientras sus orejas se echan para atrás, Eryx frunció el ceño apretando su libro con fuerza intentando no aventárselo en la cabeza al rubio. Alicia gritó «¡Cómo te atreves!», y Ron se metió la mano en la túnica y, sacando su varita mágica, amenazó «¡Pagarás por esto, Malfoy!», y sacando la varita por debajo del brazo de Flint, la dirigió al rostro de Malfoy. Un estruendo resonó en todo el estadio, y del extremo roto de la varita de Ron surgió un rayo de luz verde que, dándole en el estómago, lo derribó sobre el césped. Eryx abrió los ojos con sorpresa viendo a Ron en el suelo.

—¡Ron! ¡Ron! ¿Estás bien? —chilló Hermione. 

Ron abrió la boca para decir algo, pero no salió ninguna palabra. Por el contrario, emitió un tremendo eructo y le salieron de la boca varias babosas que le cayeron en el regazo. El equipo de Slytherin se partía de risa. Flint se desternillaba, apoyado en su escoba nueva. Malfoy, a cuatro patas, golpeaba el suelo con el puño. Los de Gryffindor rodeaban a Ron, que seguía vomitando babosas grandes y brillantes. Nadie se atrevía a tocarlo. Eryx miraba con asco la escena levantando a Gea del suelo para que no se comiera las babosas.

—Lo mejor es que lo llevemos a la cabaña de Hagrid, que está más cerca—dijo Harry a Hermione y Eryx, quienes asintieron valerosamente, Eryx baja a Gea de sus brazos.

—No te comas las babosas gea, solo camina de frente hasta topar la casa de Hagrid —Dice Eryx, Gea empieza a caminar con elegancia. Entre Harry y Eyx tomaron a Ron por los hombros.

 —¿Qué ha ocurrido, Harry? ¿Qué ha ocurrido? ¿Está enfermo? Pero podrás curarlo, ¿no? —Colin había bajado corriendo de su puesto e iba dando saltos al lado de ellos mientras salían del campo. Ron tuvo una horrible arcaday más babosas le cayeron por el pecho—. ¡Ah! —exclamó Colin, fascinado y levantando la cámara—, ¿puedes sujetarlo un poco para que no se mueva, Harry? 

Colors - Harry PotterWhere stories live. Discover now