CAPITULO 3

76 3 0
                                    

               Sebastian Pov:

Tengo tanta suerte con este pequeño pelirrojo, hasta hoy no supe que su nombre era William.

No se si sentirme afortunado o suertudo de que la maestra de arte nos haya puesto este proyecto juntos, el pelirrojo era desconfiado, algo que me intrigo un poco ya que no había conocido a nadie de esta manera, aunque es de esperar que todos sean desconfiados y mas si se trata de estar conmigo, pero el era algo diferente, era alguien que parecía enfrentar sus miedos o tal vez no tenia miedo alguno y menos al estar conmigo.

-Deberíamos comenzar con lo que sea que vamos a hacer- dijo tomando asiento en mi sofá doble, es solo para dos personas.

-Tenemos tiempo de sobra, será mejor que nos conozcamos, algo me dice que vamos a tener que vernos todos los días- en mi rostro había una sonrisa divertida al decir aquello- yo creo que debemos comenzar a llevarnos bien.

-Tu me amenazaste cuando nos conocemos, me advertiste no estar en tu camino y ahora quieres ser mi amigo- que rápido lo entiende- No gracias.

- Ya te dije que vamos a vernos a diario, vamos a convivir mucho durante varios días, lo mejor que podríamos hacer es llevarnos bien- este chico no es tan fácil como pensé, eso me gusta, voy a divertirme y de paso voy a conquistarlo, tal vez una relación sea lo que le hace falta a mi vida.

Mientras más tiempo pasaba más me gustaba la idea de estar cerca del pelirrojo, era divertido verlo enojado o sonrojado, se me hacia más fácil enojarlo que hacerlo reír, también había regresado al trabajo,  algo que me había dejado sin mucho tiempo para pasar con el pelirrojo, algo que me había frustrado ya que eso quiere decir que no tengo tanto tiempo para estudiar como hubiera querido, el trabajo pare ser doble y mas aburrido que nunca, Jeff se esta pasando de la raya.

Por otro lado esta mi hermana, casi no hablo con ella, pero cuando lo hago le pido un poco de ayuda solo para poder tener un poco mas de tiempo para hacer mis tareas y pasar tiempo con el pelirrojo. Jeff no ha estado queriendo que yo salga del trabajo hasta que termine por lo menos un par de capítulos de uno de los libros mas aburridos que yo haya tenido que leer en toda mi vida, libro que no tenia nada que ver con el titulo, ya lo había leído completo, supongo que el titulo es hacerlo ver interesante y que lo compren.

-Mi padre podría dejarte ir solo si yo le digo- genial, simplemente genial, la niña de papi viene a fastidiarme.

-Gracias, pero no gracias- dije mientras corregía algunos errores, no era mucho lo que tenia que hacer mas que corregir la gramática del libro, todo estaba en perfecto orden, creo que eso es lo que lo hace aburrido- Yo ya hable con el autor, ya tengo la idea para la portada y no me falta tanto para terminar, solo treinta capítulos mas y listo.

-Sebastian, mientras mas tardes en aceptar salir conmigo, peor vendrán los trabajos para ti- yo preferiría eso a salir con esta tipa.

-Soy un hombre muy ocupado como para pensar en romance, Jennifer, lo único que quiero ahora es terminar aquí e irme a clases, tengo mucha tarea- dije aun sin mirarla, si esta chica piensa que yo voy a acceder a sus idioteces solo porque es la hija de mi jefe, esta loca.

-Yo solo digo que seria conveniente para mi que tu y yo salgamos y que estemos juntos, tu sueldo seria bueno y no tendrías tanto trabajo- para ser sincero, yo creo que seria mucho mas trabajo ser su novio que estar aquí editando libros.

-Jennifer, si yo quisiera un sueldo mas alto, buscaría la manera de que me dieran un cargo mas alto, créeme, mi ultima opción seria salir con la hija de mi jefe solo por interés- la mire y en su cara había mucha rabia.

Jennifer era la típica chica consentida, cabello castaño claro, piel que se debate en dos colores, es mestiza, linda combinación entre dos razas, ojos miel, nariz perfilada, facciones muy femeninas, operadas, claro esta, hasta donde se, antes de cumplir sus dieciocho años ella no era asi, un cuerpo bien trabajado, iba mucho al gimnasio, pechos grandes al igual que sus nalgas. Es una lastima que no sea mi tipo, es demasiado plástica para mi.

SEBASTIANWhere stories live. Discover now