—Bueno, como ustedes asumo ya saben, el colegio ofrecerá un baile de navidad en virtud a la celebración del torneo de los tres magos y tendrá lugar en dos semanas, deben saber que tiene que tener un traje de gala si es que quieren asistir o deben avisarme de inmediato si es que volverán a casa para las fiestas, no existe posibilidad de que se vayan después del baile pues el expreso no estará disponible para sus indecisiones, saldrá el día veinte si es que quieren ir a casa y volverá el día cinco de enero— explicó— No vamos a ensayar el baile como están haciéndolo los incompetentes de Gryffindor, pues asumo que si quieren aprender tomarán una clase por su cuenta o de lo contrario se abstendrán de hacer el ridículo.

Todos comenzaron a cuchichear sobre la información entregada por el pocionista y este frunció el ceño de inmediato. 

—Silencio— bufó— Los examenes de este periodo se van a posponer hasta fines de enero, por lo que todavía tienen tiempo de salvar la reprobación— Eso es todo, ahora pueden seguir con sus insignificancias. 

Nina observó la forma en la que Draco estaba observando a Astoria, ella no la conocía mucho; era de la generación de Luna por lo que no compartían ninguna clase. No obstante se daba cuenta que entre ellos al parecer había una conexión especial. Solían hablar de temas tan simples que a veces no podía creer que era Draco el que estaba allí tan tranquilo, hablando y no molestando al resto de la sala común con sus tonterías sobre la pureza de la sangre y diciendoles a todos que eran inferiores a él. 

Al verla, ella le enarcó una ceja y sonrió de forma molestosa. Él desvió la mirada y sonrió porque sabía que Nina le estaba molestando por estar allí. Después de todo, a ella le gustaba que él comenzara a rodearse de personas que veían algo más allá en él que la popularidad o su dinero. No es que no le gustara Pansy, pero ellos no se veían felices, ambos sacaban provecho de el otro y después de todo eso no era sano por mucho que estuvieran acostumbrados a aquello. 

Por otra parte, en otro lugar de la escuela Fred se encontraba teniendo una de sus clases favoritas, Runas Antiguas se le había dado de manera natural y ahora era uno de los mejores de la clase, tanto que en algunas ocasiones Hermione le pedía ayuda para que corroborara sus pergaminos aunque no quisiera que nadie lo supiera. Disfrutaba de las clases y eso era bastante extraño, jamás había estado pendiente de su desempeño académico, no obstante ahora con todo el movimiento del torneo de los tres magos había estado algo abrumado, no estaba acostumbrado a ver tantas personas por todas partes y eso lo hacía estresarse en ocasiones. 

Por ende ahora disfrutaba de las clases aunque no fuera a admitirlo tampoco. 

—Jóvenes, van a sacar un pergamino al azar, según los pergaminos del grimorio perdido de Excálibur, cualquier hoja que saquen de aquí, significa que es una predicción para ustedes.

Él en particular no era muy creyente de las predicciones, cuando niño había jugado en una feria y una supuesta bruja le había dicho que sería millonario y rico cuando tuviera quince años, ya los había cumplido y no tenía una gran fortuna.

—Siempre tratando de engañarnos— susurró George en su oído. 

—Esa es una de las cosas que vienen con la magia, por lo general siempre hay cosas que no vemos o cosas que nos quieren hacer creer que existen—se rió Fred.

—No se burlen, jóvenes— les respondió el profesor—Créanme cuando les digo que esto de verdad pueded darles una predicción certera del futuro, puede ser en relación a cualquier cosa, a cualquier ámbito de sus vidas, no sólo al que ustedes estén esperando. Propongo que mantengan su mente abierta y confien en el poder selectivo de sus manos.

Juramento Inquebrantable [Fred Weasley]जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें