~ P R O G R A M A D O S ~ (Mitch x Five)

Cap 21: please don't

Después de la vergüenza que pasó con el comentario de su abuela sobre Mitch y él, decidió encerrarse en su cuarto para sufrir en silencio. No sabía como estaba Mitch y tampoco tenía muchas ganas de saber, después de todo se sentía demasiado avergonzado como para hablar con nadie. Solo quería hacerse bolita en la cama y hundirse en su sufrimiento.

A la mañana siguiente se despertó con una gran paz al ver su cuarto tranquilo y en silencio, la luz del sol comenzaba a colarse por su cuarto. Y todo estuvo en paz hasta que recordó lo de la noche anterior, se puso como un tomate y tapó la cara con la almohada esperando que lo asfixiara así no tendría que bajar y encontrarse con sus abuelos y Mitch. Pronto se dio cuenta que en algún momento tendría que salir de su cuarto, aunque si hacía un agujero en la puerta podrían darle comida por ahí... pero no, no tenía las herramientas ni la habilidad para hacer eso y lo más probable es que su abuela rompería la puerta de una patada para entrar a sacarlo de su cuarto.

Así que con todo y vergüenza se cambió y corrió por el pasillo hasta el baño para no cruzarse con nadie. Hizo su rutina diaria y, después de hacer varias respiraciones profundas para calmarse, salió y bajó las escaleras, escalón tras escalón iba sintiendo el olor a su desayuno favorito y escuchando murmullo en la cocina, se acercó a la puerta y se encontró con Mitch sentado en la cocina mientras hablaba tranquilamente con su abuela.

- ...trabaje desde muy joven en la tienda hinobi, por eso no me fue dificil arreglarla... - Five se quedo callado para saber a que se refería.

- Esa televisión siempre tuvo problemas, pero nisiquiera Five pudo arreglarla... quieres huevos o... - Mitch parecía de lo más tranquilo, lo que en parte lo hizo calmar un poco sus nervios y disponerse a entrar, pero la voz de su abuelo lo sacó de sus pensamientos.

- Así que tu novio ya se esta ganando a tu abuela eh - dijo bajo para que solo Five lo escuchara - parece buen chico... - miró por a puerta.

- Si, lo es... - río nervioso - oye abuelo... sobre lo de anoche, yo quería discul...

- No, no, no te disculpes. Todos tuvimos tu edad, solo estás experimentado cosas nuevas - se encogió de hombros - y quiera admitirlo o no, tu abuela y yo hicimos cosas peores - río mientras parecía recordar buenos momentos. Five se quedó callado tratando de no hacerce ideas, no necesitaba esas imágenes mentales de sus abuelos - vamos hay que desayunar - ordenó y sin esperar respuesta abrió del todo la puerta haciendo que los otros voltearan a verlos.

- Buenos días... o querré decir buenas tardes - saludó su abuela mirando el reloj de pared - ya va a estar tu desayuno cariño y Five el tuyo esta junto a Mitch - Five caminó hasta su asiento y callado comenzó a comer. Cuando su abuela hubo servido el desayuno a su abuelo se sentó frente a los chicos y los observaba al tiempo que tomaba su café de todas las mañanas.

Tanto Mitch como Five no decían nada y su abuelo se dedicaba a leer el periódico para fingir que no notaba lo que estaba pasando. Five tenía la cara roja y temblaba con la idea de que su abuela le nombre lo ocurrido. Por parte de Mitch, todo estaba bien, tomaba su café y ocasionalmente sonreía a su abuela al cruzar miradas, como si desayunara diario en esa cocina.

- Bueno tenemos que hablar - sentenció finalmente dejando su taza de café casi vacía sobre la mesa, aún se veía un poco de vapor salir de la misma. Five quiso que lo tragara la tierra y Mitch dejó su desayuno para mirar a la mujer - No se que son exactamente, pero les diré solo una cosa - dijo mientras sacaba una bolsa blanca de debajo de la mesada y se las tendió - usenlos o los castro - tomo de nuevo su taza, la cual tenía grabado "abuela N° 1", y siguió tomando su humeante café.

En cuanto Five abrió la bolsa casi escupió un pulmón por ahogarse con el pedazo de tocino que acaba de meterse a la boca. Mitch abrió mucho los ojos, pero fuera de eso solo asintió y río por la iniciativa de la mujer de darles una bolsa de preservativos.