Introducción

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A veces la vida no es justa, por más que nos esforcemos en ser buenas personas, siempre nos va a pasar algo malo que nos hará dudar de nuestros objetivos en la vida.

Y si no lo creen, ahí estaba yo, frente a la tumba del único familiar que me quedaba, mi querido abuelo Matthew.

Mis padres murieron cuando era muy pequeña, realmente no tengo ningún recuerdo de ellos, solo lo que me contó mi abuelo.

Estaba lloviendo pero eso no pareció importarme, ya que no me moví aunque me estaba mojando, todavía no asimilo la pérdida.

Mi abuelo era una persona muy supersticiosa, creía fielmente en que había algo más allá de la muerte, y que demonios vagan por la Tierra tratando de corromper a las almas inocentes.

Yo nunca creí en esas cosas, pero —porque claro siempre hay un pero en una historia— días después de su muerte, en la repartición de la herencia, el abuelo me dejó la única cosa que para él era de mucho valor, un amuleto, me dijo que me protegería de todo mal y sería recompensada si lo usaba para el bien.

No le presté atención en ese momento, pensé que eran divagues de una persona moribunda, pero mi futuro se vería alterado gracias a ese extraño amuleto.

Ven y atrévete a leer mi historia.

Solo te doy un consejo, nada es lo que parece.

Nota de autora:

Esta historia está concursando en el Open Novella Contest 2021 de AmbassadorsES.

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