31-. Para mi ángel de la guarda. Nothing Compares 2 U (Sinead O'Connor).

26 3 9
                                    

Es más que tus ojos verdes,
es más que tu cabello negro,
aunque me vuelva loca
la combinación.
Es más que haberte visto con aparato
y ahora bellísima sin ello.
Es más que eso, te lo prometo.
Es más que tu nuevo peinado
(me alegro
de que me hayas hecho caso
con lo de la raya al medio)
y que me agrades con maquillaje.
Es que eres mi ángel de la guarda,
me acompañas en el viaje.
Puede que este coche
no tenga
cinturones
de seguridad,
pero eso nunca te ha importado;
aunque a veces nos hayamos chocado
y ya no hablemos tan a menudo,
tú sigues siempre a mi lado.

Nada ni nadie se te compara, BFF.
¿Quieres saber por qué?
Nos conocimos en una yincana
hace ya ocho años
más o menos.
Estaba prácticamente estrenando
mi scooter nueva.
Mi padre me ayudaba con las pruebas.
(¡Ay! Qué inocentes éramos.)
Verás, tú estabas ahí ese día
y a pesar de que no recuerdo casi nada
de esa jornada,
recuerdo que te admiré
nada más verte.
Recuerdo todavía cuando eras
una niña
con la que me mensajeaba
por email.
Recuerdo, animalflor.
Recuerdo nuestra amistad
de
entonces
Recuerdo los grupos de WhatsApp.
Recuerdo que ni siquiera sabía usarlo
del todo.
Recuerdo que desde siempre
que recuerde
has estado ahí.
Recuerdo mi camiseta
de la novia de Stitch
que mis padres me compraron
en Disneyland Paris.
Recuerdo que tú solías llevar
cintas para el cabello.
Recuerdo que querías ayudarme
con todo, y lo sigues haciendo hoy día.
Recuerdo que siempre sabías
(y sabes)
lo que quería y lo que necesitaba
antes de que te lo pidiera.
Recuerdo...

Oh, claro.
Recuerdo Torres de Malory
¿lo recuerdas tú, Angie?
Incluso te hice un marcapáginas
trenzado
con lana
verde y blanca
(Nostalgia...
Hacía muchos por esa época,
y siempre que los miro
me recuerdan a las niñas que fuimos).
Hay cosas que recuerdo
y otras que no,
pero siempre recordaré que fuiste tú
la que sugeriste ir a ver Coco.
Nunca te lo agradeceré lo suficiente,
Ángela,
créeme.
La vimos en el cine,
tú, mi padre y yo.
Así como
Cenicienta
y Del Revés (Intensamente).
Recuerdo comprar camisetas
a juego.
Y regalarte una,
¿todavía la tienes?
Recuerdo jugar con tus amigas.
Recuerdo ir en el tren ese tan raro
hasta Llanera y vuelta a la feria.

Recuerdo muuuuchas cosas nuestras.
Recuerdo verte tantas veces.
Recuerdo ir de tiendas.
Recuerdo sentarnos a la mesa
del restaurante ese que cerró,
(casi) todas esas tardes.
Recuerdo cuando viniste a la Warner
con tus compañeros.
Han pasado muchos años ya,
pero recuerdo.

Recuerdo
que desde siempre te han gustado los
animales
y la vida de campo
y recuerdo que siempre has sabido
que a mí me aterran
los perros y los gatos.

Recuerdo con cariño
los intercambios de libros
y que a veces tú no te los terminabas
para la fecha en la que nos veíamos
una vez más.

Recuerdo.
Y si recuerdo
tantas cosas
es gracias a ti, amiga.
Hiciste mi edad tween
mucho menos solitaria.
Me has acompañado a cada paso
del camino
y me has ayudado
a querer
recorrerlo.
Pensé que tenía otras best friends
pero nadie se te compara
y al final,
decepcionada de los demás,
siempre vuelvo a ti, porque me amas
de la mejor manera
en que dos amigas
pueden amarse.
Has soportado que te contase
todo cuando me peleaba
con mis padres,
y sé que de necesitarlo otra vez
puedo volver a mensajearte.
Me has apoyado en cada fascinsebsión
y eso aún hoy me llena de emoción.
Has leído La visita de Héctor Rivera
y sé que también algunos
de mis poemas.

Te he compartido
los grandes hitos
de mi vida.
E incluso ahora que estoy
al otro
extremo
del país
sigues estando cerca.
Nuestra relación es extraña.
Podemos estar meses sin hablar
y aún así un día volver a conversar
como si no hubiera pasado el tiempo.

Escribo muchos
versos
sobre cómo he cambiado
y cómo cambia todo
con el pasar de los años.
Tal vez uno de los motivos
por los que nuestra amistad
me reconforta tanto
es que seguimos tratándonos igual
de genial
aunque nada en nuestras vidas sea
lo mismo que cuando nos conocimos.

Nada ni nadie se te compara
y sé que serás una gran psicóloga.
¿Que cómo estoy segura?
Porque eres una gran persona
y es una bendición poder llamarte
mejor amiga.

Nada ni nadie se te compara,
ni lo hará nunca,
porque incluso cuando
solo hablamos
de astrología
(o de música)
me haces sentir amada.
Nada ni nadie se te compara,
porque siempre me recuerdas
y te acuerdas de mí.
Nada ni nadie se te compara.
Suerte en tu vida adulta,
te prometo que te acompañaré
durante todos los años que pueda
(siempre que me quieras a tu lado).

Te amo muchísimo, amiga.
¡Feliz mayoría de edad!
Gracias por ser parte de mi vida.
Te he visto crecer
y madurar,
ahora es tiempo de verte florecer.
Gracias por toda nuestra amistad,
Angie.
Eres mi ángel de la guarda.
🧚🏼‍♀️✨🥰




(Para ngelaFernandezGonzal , mi mejor amiga de más de la
mitad
de mi vida.
Te quiero muchísimo, muchísimo, Angie.
Gracias por soportarme
y por amarme igualmente.
Eres el vivo ejemplo
de lo que es una verdadera
amiga.
Gracias por recordarme
quién soy, siempre.
Espero que disfrutes
de toda tu existencia,
de tus dieciocho años
y de este poema.
Hablamos cuando puedas.
Estoy aquí para lo que quieras.

A todos los demás...
¡Feliz Imbolc!
Feliz comienzo
de febrero,
de la primavera...
o del otoño,
según se vea.

Y entre música y versos
este desafío de enero
se termina
en este momento.
Gracias
por cada visita,
voto
y comentario.
Nos vemos
ya mismo
en mi próximo poemario,
"Poemas para los poetas
sin poesía".)

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Feb 01, 2021 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

31 canciones hechas poesíaWhere stories live. Discover now