Memorias de la Muerte

Fuego

Había sido acusada de bruja, sus verdes ojos miraban minuciosamente a los hombres que la habían acusado de su herejía
. Una pequeña lagrima se derramó por su blanca piel como el deshielo de la primavera. Estaba atada a un gran poste de madera de roble. Se le habían hecho unas heridas alrededor de las muñecas, las cuales sangraban moderadamente. El hombre al que observaba hizo una señal, la cual entendieron muchos y se empezaron a oír los abucheos hacia la mujer de los ojos esmeralda. En ese momento se vio como un hombre encendía una antorcha y la posaba sobre los troncos de leña que había bajo los pies descalzos de esta. Le quedaba poco

Poco a poco el fuego fue invadiendo la leña hasta que tocó los pies de la joven, sintió un calor agradable que posteriormente se convirtió en la más horrible de sus pesadillas. Se veía como gritaba de dolor debido a la rapidez con la que se expandía el fuego sobre su cuerpo, su último grito ahogado fue el más conmovedor, después de esto se convirtió en un conjunto de cenizas.

La gente fue esparciéndose, hasta que la plaza se quedó vacía exceptuando a una mujer que lloraba tirada junto a las negras cenizas que se depositaban en el medio. Me hubiera gustado quedarme más pero mi trabajo había terminado.