Tráfico y Pasión

capítulo 8

Hoy se cumple dos meses de
Desde que estoy casada con Alex y no lo he visto
desde el incidente en el pasillo e indescriptiblemente lo extraño.
Ese pequeño acercamiento en la piscina me hizo ver que no es tan arrogante como creía, al menos no todo el tiempo.

Por momentos siento calor en los lugares que el me tocó, aquella vez en el restaurante, al recordar el ávido beso de ese día y se que ya no puedo negarlo por mas tiempo, lo deseo.
Tengo que encontrar la manera de acercarme a él, ser su amiga, lograr que confíe en mí.

Hoy iré al club con Amber y le pediré su opinión, se que no es la mejor dando consejos pero al menos me ayudará a descargarme.
Mientras me dirijo a la cocina, escucho un sonido al pasar por el despacho.
No he entrado en el desde el funeral de Max.
Es tan grande y espacioso, con el mobiliario de cerezo, su vitrina esta repleta de los whiskys predilectos de mi padre y detrás del escritorio hay una gran biblioteca que ocupa toda la pared.

Recuerdos de niña invaden mi mente, solía pasar horas sentada en su sillón pasando las paginas de cada libro que pudiera alcanzar.

El sonido me trae al presente nuevamente.

Me acerco al escritorio y noto que viene de la notebook, es una alarma,en la pantalla un mensaje salta a la vista.

Hoy: Cita con Mery.

¿Quien demonios es Mery?

¿Será una amiga, una cita de negocios o ... una amante?
Al pensar en la última posibilidad un sabor amargo se adueña de mi boca.
Lo observo por un momento antes de salir e ir a la cocina.

Al entrar me siento en un taburete en la Isla, este lugar no ha cambiado nada desde que era una adolescente. Las paredes siguen siendo blancas los muebles negros, las mesadas de mármol negro y los electrodomésticos de acero inoxidable.

-Buenos días cielo- saluda Mina, ella ha cuidado de mi desde los 6 años.

-Buenos días Mina- contesto.

-Es un día precioso, tienes planes?- pregunta mientras me sirve el desayuno, café con azúcar, crema y tostadas.

-Ire al club con Amber.

-Es una gran idea -Comenta.

-Has visto a Alex ?-suelto de repente.

-Salio muy temprano -es todo lo que dice.

-Ok, Adiós Mina- salgo sin esperar respuesta.

Después de horas de jugar al tenis,en el club "Golden Sport" con Amber le pregunto sobre mi relación con Alex.

-Seducelo, metete en su cama -contesta.

-Caray Amber, sé seria - gimo.

-Lo digo en serio, yo en tu lugar...Auch- grita cuando golpeo su brazo.

-Lo mereces.

-Lo sé- me observa por unos segundo estrechando los ojos- Te estas enamorando de él?

- ¿Que?No, eso es absurdo - contesto

-Lo es? Alex es un Hombre muy atractivo.

-No importa lo atractivo que sea,no es Gabe.

-No sería una traición enamorarte de otro, Gabe Murió hace mas de tres Años.

-No me estoy enamorando, no seas estúpida- apuro el paso dejándola atrás.

Llego a la mansión y subo corriendo a mi habitación mientras las lágrimas nublan mi vista al girar por el despecho choco con un duro cuerpo y caigo al piso.
Alex me ayuda a incorporarme y entonces nota mis lágrimas.

-Por qué lloras Avery?- pregunta.

-No es nada.

-Tu no eres de las que lloran, así que debe ser por algo- ¿como sabe el eso?

Me quedo mirándolo unos segundos y por un momento su mirada vuelve a tener el brillo que vislumbre en nuestra boda.

Esos ojos...

Rápidamente cualquier emoción desaparece, su mirada vuelve a ser de hielo y me hace preguntarme si solo fue mi imaginación.

-Avery...-insiste.

Ya no aguanto estar bajo su escrutinio por lo que corro a encerrarme en mi habitación.
Tomo una ducha helada y me acuesto pensando en Gabe y en los sentimiento que estoy teniendo por Alex hasta que soy arrastrada a los brazos de Morfeo.