Disculpa ¿Eres mi jefe?

Mi primer día de casado

Mmm me levante de la cama perezosamente e hize mis necesidades, me lave la cara y me cepille los dientes. En una cafetera que había en la habitación puse un poco de café y espere a que estuviera listo.

Salí con mi taza humeante al balcón y me senté en este, dentro de la cabaña aun seguía un Williams dormido. Vi el reloj de la mesita y me di cuenta que eran aproximadamente las 5 de la mañana, había dormido casi 24 horas. Me sentía con mas animo hoy, era mi primer día de casado literalmente, estuve un par de minutos viendo el paisaje a oscuras y pensando en diferentes cosas. Sentí como la madera crujía y un perezoso Will salia restregandose los ojos.

-ya te despertaste- yo asentí- es café?- pregunto señalando mi tasa.

-si, quieres- dije tendiendosela, vi como tomo un sorbo e hizo un sonido de placer- que haremos hoy- este me dio una mirada picara y pude adivinar que estaba pensando- a parte de eso- este hombre hasta recién levantado piensa en sexo.

-mm pues e alquilado un equipo de buseo, que dices?- me pregunto.

-cuando hiciste eso, no has salido de aquí

-mientras dormías salí un momento hize un par de llamadas y fui a recepción a preguntar que actividades tenían- dijo. simplemente- te agrada la idea- me preguntó.

-si, me encanta- dije con una sonrisa colgante total.

-ok tenemos que estar en la playa a las nueve y son las - vio el reloj- sinco y media, que dices si hechamos un mañanero- me preguntó alzando su ceja.

-un mañanero?- pregunte y este asintió- solo piensas en sexo will-le pregunto, este dudo en contestar.

-no siempre, el 70% de las veces- dijo con una sonrisa tímida.

-jajajaja, me encanta la idea- dije parandome de donde estaba sentado.

Bese sus labios y este me alzo y enredo mis piernas en sus caderas. Me guió a la habitación y me deposito en la cama, me beso lenta y tortuosamente todo el cuerpo, mientras yo gemía por más, me desnudo de lo único que me cubría el cuerpo en ese momento, unos boxers y una bata de baño. Se desnudo el y entró lentamente en mi, entraba y salia despacio con una calma que me sorprendía de el. Me hizo el amor de una manera tierna y dulce.

A las 9 de la mañana estábamos en la playa poniendo el equipo de buseo en nuestro cuerpo, el chico que debía tener unos 25 años nos enseñaba que teníamos que hacer.

Estábamos en un bote, el cual nos llevaba un poco alejados de la orilla, para que pudiéramos disfrutar de la vista bajo el mar. Al caer al agua lo primero que vi fueron peces, muchos peces de diferentes colores, sentí una mano en mi espalda, al darme la vuelta Williams me estaba señalando algo a su lado, o dios una tortuga enorme estaba nadando a su lado, no quedamos un rato observándola hasta que vimos también un tiburón, el chico del equipo de buseo nos había explicado que si veíamos uno, no saliéramos huyendo, así que nos quedamos tranquilos viéndolo nadar.

Varias horas después salimos del agua a comer algo, debían ser las doce o una de la tarde, comimos sentados en la arena viendo al mar, mientras Williams me daba una que otra carisia.