El resto de esa reunión que prácticamente pareció eterna, ahora es una memoria más en la piscina de recuerdos de mierda que tiene su mente. Por el momento dejará que la amargura del licor le adormezca la garganta, aunque parece no tener efecto inmediato y eso es francamente molesto.
- Tú resistencia al alcohol, aumenta.
Y ya ni refugiarse en la comodidad de su laboratorio puede porque es acorralado a pocos minutos de haberse librado de miradas inquietantes.
- Bruce, ve a joder a Kansas y déjame en paz ¿quieres?
Resumiendo el resto de una de las reuniones más estresantes en su vida, Ross terminó decidiendo que la llegada de Bruce le daba todo el permiso del mundo para irse y dejarlos en lo que francamente pudo convertirse en la Civil War. Terminó delegando el papel de la comunicación entre Steve Rogers y él a base de Strange, confíen en Steven como ser sociable, el único que no arrojará un martillo, se volverá si se enoja o terminará cavando las tumbas de alguien para después decir que accidentalmente terminaron muertos...
- Ustedes imbéciles solo me dan más trabajo...
- Pero ambos sabemos que eso no es lo que te molesta.
El multimillonario de Gotham City toma sin previo aviso la jarra de whisky que el castaño sostenía vertiendo parte del liquido en un vaso de vidrio y dando un lento sorbo. Su declaración quedó en el aire, el silencio del taller les hace compañía, en otras circunstancias eso puede ser acogedor, pero actualmente en donde más ruido hay es en la mente de Tony Stark.
- Gracias por desalentarme Bruce, ya lo estaba pero igualmente, gracias.
Su respuesta es evidentemente sarcástica, intenta reprimir la sarta de palabras hirientes que quisiera decir porque no quiere terminar discutiendo con su mejor amigo ¿es mucho pedir? En este día de mierda en donde todo parece haberse ido al abismo.
- Tony... necesitas hablar con alguien sobre ello.
- Creo, B, que no eres la persona indicada para decir eso...
Es solamente por el hecho de que se conocen desde hace años que pueden leer a la perfección el lenguaje corporal del otro, por ello Tony sabe que ha tocado un punto medianamente sensible, porque por imperceptible que sea Bruce se tensa levemente.
- Tu no eres yo.
- No, solo soy otro idiota que no sabe lidiar con sus emociones, por eso recurro a la segura y confiable autodestrucción.
- Hay otro modo.
- ¿Sobrecargarme de trabajo como tu, por ejemplo? Tal vez ir a pelear con todo delincuente que se me cruce en frente, sin traje, quebrar mis huesos, no dormir por una semana ¿eso estaría mejor?
El pelinegro frunce el ceño y aunque lo sabe mejor, aunque sabe cómo no debe reaccionar a sus comentarios, esto es parte de su dinámica...
- Tu estilo es más de beber hasta perder la consciencia ¿por qué el alcohol lo reprime todo, no? Pero con años bebiendo tu resistencia aumenta, por lo que buscas bebidas más fuertes, al igual que yo, te sumergiras inventos de lo primero que se llegue a la mente, ni siquiera te molestaras en comer o dormir.
Oh... así que iban a jugar esto eh...
- ¿Qué quieres que diga, tipo emocionalmente estreñido? Vienes aquí con expresión de terapeuta cuando sabes que los aborrezco porque creen saber todo sobre las personas, oh pero así eres tú también ¿cierto? Crees saberlo todos sobre todos incluso de mí, cuando lo único que sabes son datos, puras letras de mierda y por supuesto desconoces las emociones detrás.
- ¡Maldición, Anthony! Solo te pido que hables de ello, ni siquiera tiene que ser conmigo, no es bueno que te guardes las cosas para ti mismo y sufras en silencio.
- ¡Podría decir lo mismo de tí! En lugar de estar en tu preciada Gotham, estás aquí ¿Acaso discutiste con Smallvile y por eso decidiste acordarte de mí?
- Tony...
- Ve con él ¡Ve, acuestate con el idiota y restriegame en la cara que tú, tu tendrás a quien te supuestamente ama a tu lado, que tendrán sexo porque te ama, que no te esta usando!
El castaño no se dio cuenta del preciso momento en el que apretó las manos en puño y tampoco meditó sus acciones porque al segundo siguiente lanzó un golpe directo a la mejilla izquierda del contrario, por supuesto su mano terminó siendo tomada por el pelinegro, quizá no lo tomó tan en serio o solo estaba verdaderamente cansado pero finalmente después de un par de minutos ambos acabaron con distintas magulladuras en sus cuerpos, terminando en el suelo con sus cabezas recostadas en la pared.
- Entonces... ¿El alienígena bastardo te dejó?
- Al parecer no está a favor de los acuerdos de Sokovia y repentinamente la señorita Lane parece ser mejor opción para él.
- ¿Lo último te lo dijo o lo dedujiste?
- Lo segundo.
El ojiazul se encoge de hombros, desde siempre siente que ha competido con lo Lois Lane pero es hasta que Clark no se opuso a los avances de la chica que todo cambió.
- ¿Rogers fue tu ex, no es cierto?
- Para este punto... creo que fui su liberación sexual.
- Mientras estabas con la señorita Potts.
- Si estuvimos en una relación, pero ella terminó tomando el papel de niñera, finalmente se rindió y bueno, ya sabes, lo de siempre. Acabe solo.
- Pero llegó Loki.
- Quien sorprendentemente aceptó lo que Rogers no pudo, sí. ¿Jordan te "corteja" ahora?
- ... Hablaste con Alfred. Y no, lo llamaría cortejo. Loki no está informado de la naturaleza de tu relación con Pepper y tampoco de tu relación con Rogers pero lo sospecha.
- ... Hablaste con Viernes. Cortejo es una palabra anticuada pero Alfie lo dijo, queda bien. No sabe la naturaleza de mi relación con Steve... pero quizá lo sospecha y por supuesto no sabe lo de Pepper.
Es en ese momento, en donde de manera tan natural y propia de ellos sueltan sus preocupaciones, al menos parte de ellas y de la nada comienzan a reír por lo bajo.
- Debemos ponernos al día, Brucie.
- Estamos haciéndolo, Tony.
- Sabes a que me refiero, no seas idiota.
- Más idiota que tú, nunca.
Aún hay cosas que están sin decirse, pero por el momento, esto es más que suficiente, hay tiempo... y además, necesitan relajarse un poco... se escuchan pequeños bostezos al unísono y sin darse cuenta, ambos adultos terminan recostando su cabeza sobre el hombro del contrario, un robot muy familiar coloca con una delicadeza única una manta sobre sus cuerpos.
El corazón a corazón... o lo más parecido, es agotador.
