Robando tu corazón ( Tian Guan Ci Fu)

Parte 1 El cambio de eras

Escuchó sus pasos detrás de él, pero no se dio la vuelta. Su mirada se perdía en el nuevo paisaje que el mundo le ofrecía.

Mientras el viento soplaba con fuerza y desparramaba sus largos cabellos negros, solo el leve movimiento del agua chocando contra la arena le trajo tranquilidad y lo distrajo de aquellos ruidosos sonidos que jamás había escuchado.

—Mi señor.

Escucho su amable voz fina, pero poderosa. No necesitaba verlo para saber que seguía siendo la misma persona.

— ¿Cuánto tiempo ha pasado?

Aquella persona que vestía hermosas túnicas de seda blanca con bordados rodados en sus extremos, abrió varias veces la boca, reteniendo las palabras que estaba en sus labios, pero al final solo suspiro algo resignado.

—Mucho tiempo. Mi señor ha dormido muchos años.

Por la altas edificaciones y luces que no necesitaban velas ni aceite para iluminar la calles, sabía que ese mucho tiempo era más de lo podría contar.

Lo que alguna vez fue sombras cubriendo las avenidas, ahora la luz estaba tanto de día como de noche. Los bosques habían desaparecido siendo reemplazados por casas de concreto duro, incluso el mar que antes era basto y abundante, ya no portaba el mismo brillo de antes.

— ¿Qué pasó con él?

La pregunta lo sorprendió. Hubo nostalgia en sus ojos como se perdiera en algún recuerdo lejano, pero inmediatamente su mirada se volvió clara.

—Hace mucho tiempo que se ha ido.

No hubo cambio en su fría mirada, sus pestañas se cerraron por un momento y al abrirlo de nuevo sus ojos dorados revelaron una emoción difícil de descifrar

—Su alteza...Su majestad. — Se corrió al darse cuenta que eso debió haber dejado de ser hace mucho.

—No me importa ¿Qué puedo hacer por mi señor?

—Puedo sentir los dispositivos espirituales en diferentes lugares, no es algo que daba estar en manos de los mortales. Los recuperaré.

—Eso..— Negó con la cabeza frustrado— El mundo ha cambiado desde entonces, me temo que para proteger nuestra existencia, ordene que ninguno intentará recuperarlo, de lo contrario quedamos al descubierto.

—No soy un dios.

—También esto se aplica a los supremos. Esta era es diferente, no solo los dioses han sido olvidados, también los reyes demonios han dejado de ser temidos, ya no pueden vivir de la sombras.

—El mundo ya ha cambiado.

—El mundo sigue igual, solo que ya no queda nada en él.

Al ver que desaparecía de repente, entendió que sus palabras serían ignoradas. Dudo en ir a detenerlo, después de todo seguía siendo un supremo, siendo alguien que siempre mantenía el perfil bajo no creía que fuera exponerse tan fácilmente.

Sin embargo, en su corazón suspiró. Miró la luna en el cielo nocturno, antes estaba rodeada de hermosos puntos blancos, ahora no podía apreciar ninguna debido a la luz que emitía la ciudades para escapar de la oscuridad.