Con Ellos (rolplay y tu)

16

Había pasado dos semanas. En esas dos semanas Gustabo y Horacio se metieron en la mafia, Manolo, Tonet y Gringo se fueron del país, el Chino estaba mas encima de Adelaida y el superintendente no dejaba de pensar en si hizo bien.

En esas dos semanas, Adelaida notaba un aire de tensión muy cargado en el ambiente. Sabia que algo no andaba bien, pero no entendia nada. Últimamente la mafia no la contaba nada, no la mandaban a por inflación, no la hacian robar, ni si quiera podia ir a la base. Por parte del CNP, sus hermanos estaban muy raros. Gustavo actuaba muy raro, se reía sin razón alguna, a veces se llamaba Pogo y deseaba matar a todo el mundo. Adelaida, cuando su hermano mas mayor le ocurría eso, le abrazaba como si no hubiera un mañana, haciendo que aquel monstruo desapareciera de su hermano.... O eso pareciera. Horacio parecía demasiado desanimado, tanto que ya apenas hablaba con su hermana menor. Era como... Si ya no existiera aquella niña, como si nunca se hubieran conocido aquella noche, como si fuera un completo fantasma olvidado. Greco había desaparecido, o bueno,se fue a una mision secreta encargada por Conway, sin poder despedirse de Adelaida y estar al menos un año incomunicado con nadie. Conway estaba mas nervioso de lo normal, sabia que debía hacer, pero... ¿y si daña a su hija? ¿y cuando se lo diría? Exacto, todavía no dijo ni una sola palabra a la chica.

Mientras una operación policial y mafiosa se llevaban a cabo, Adelaida estaba en casa reposando. Ya estaba en el segundo trimestre de embarazo, y como no,  su tripa iba aumentando poco a poco. Ella ya conocia a Michelle, aunque no intercambiaban demasiadas palabras.

La chica de ojos bicolor estaba intentando dormir una siesta. Últimamente tenia demasiados sueños, normalmente en el que se repetía era uno de no muy buen trago. En el sueño podía ver a su supuesto hermano con el mismo problema que Gustabo, mientras mataba pequeños animalitos. Uno de ellos era su hámster, el cual era blanquito con manchitas negras como un panda. Su hermano lo ataba, descuatizaba, lo quemaba... Todo delante de su hermana. Solo porque eligió una película en aquella noche tan especial del cumpleaños de su hermano.

Adelaida se levantó agitada, con lágrimas en los ojos del miedo que pasó. Cada vez entendía menos de los sueños qie tenia, no era capaz de llegar a una conclusión. ¿que debería hacer? ¿y si se lo contaba a sus hermanos? Sabia la pequeña que seria inutil, ninguno de ellos estaba en condiciones para ayudarla con sus sueños. Sabia que ella era una carga ahora mismo, tanto que no la dirigían apenas la palabra.

Adelaida, entre lágrimas, decidió buscar una casa en la que mudarse. Ella sabia que debía marchar, a un lugar donde no molestase. O al menos es lo que ella pensaba. Debía aprender a vivir sola, administrar una casa sola y poder ser independiente. Se dio cuenta de que ya no era una niña, de que debía avanzar. Encontró una casa cerca del norte con un amplio jardín, cuatro habitaciones y además garaje. No se veía nada mal la casa. Seria un buen lugar para criar a su hija y formar allí una familia.

Llamaron a su puerta, cosa que la extrañó. A la chica nunca la venia a visitar sobre esta hora, era ella la que solia visitar a los demás y eran en las tardes. Avanzó hasta la puerta abriendo con cuidado, encontrándose con la cabellera naranja de Michelle. Adelaida la miro extraño, ¿que hacia la jefa del CNI en su casa? Se preguntaba esa pregunta a si misma. Michelle la miró seria, debatiendo entre contarla o no.

-Buenos dias señorita Evans, ¿que hace por aqui?- dijo dejandola entrar. La pelirroja paso mirando a la chica seria. En su mano llevaba un sobre, el cual contenía muchas respuestas. Se sentaron las dos en el sofá del salón, una enfrente de la otra. Adelaida estaba confusa y asustada, en cambio, Michelle estaba seria dejando la carta en la mesilla de café y procesando las palabras que soltaría por su boca.

-Este sobre es para ti, Jack quería que lo abrieras cuando el terminase con todo este caos de la mafia. He decidido dártelo yo en persona, ya que difícilmente vaya a  salir vivo de esta guerra. Veas lo que veas en esa carta, ten en cuenta que Jack solo quería lo mejor para ti, no quería que te pasara nada dentro de la mafia...- mientras la chica con pelo zanahoria hablaba, con voz lo mas firme que podía, Adelaida se encontraba abriendo aquel sobre tan misterioso el cual la transmitía temor. Podria ser un despido, podria ser una orden judicial por estar en una mafia, podria ser hasta una orden de fusilamiento. Pero al leer su contenido, esas ideas se disolvieron, comenzando a recordar.

-quiero a mi papa....- decía una niña pequeña abrazada a un osito de peluche, y llorando, dentro de una habitacion oscura y húmeda. No era muy grande la estancia, lo suficiente para que la niña se tumbara y anda se dos pasos. La puerta era de hierro con corrosión de una pequeña gotera que se podía ver en el propio techo de la habitación. Parecía haber estado así desde hace mucho tiempo. La niña llevaba un vestido verde, rasgado por los daños colaterales del rapto. Sus ojos bicolor eran acompañados de un rojo chillón, del llanto que tenia. Además estaba helada y notablemente herida.

Unos hombres abrieron aquella puerta, donde uno de ellos cogió a la niña como saco de patatas. La llevaron a una habitación, donde habia una camilla en el centro. Al lado de aquel objeto, había un carrito  con varios artilugios, el mas notable era una jeringa con liquido marrón. La niña estaba asustada, ya que aquellos hombres se dedicaron a atarla en la camilla, dejándola inmóvil. Minutos después, aparecieron dos sujetos, muy familiares para la niña. El primero, era su tio Roy, el cual desaparecio después de su ultimo viaje con su padre por el ejercito. Y el segundo era su hermano. Esa cabellera rubia, junto con aquella sonrisa siniestra, definía demasiado bien que su segunda personalidad estaba presente, Pogo. La niña lloraba con miedo, tratando de soltarse. No entender que hacia ahí ni que querían.

-bien pequeña... Tu no te vas a mover y yo te pinchare esto. ¿Esta bien?- dijo el mayor cogiendo la gringa. La niña asintió mirando a su supuesto hermano, el cual reía viendola sufrir de aquella forma. -bien... Recuerda lo siguiente niña... Dile a tu padre que lo estoy buscando... Y que esto es un advertencia. Dile que Roy, quiere su cabeza, la cabeza de Jack Conway....- según acabó, solo pudo ver oscuridad.

Adelaida estaba lagrimeando mirando en shock el papel. Jack Conway era su padre, y Gustabo era su hermano. Todo este tiempo estando a su lado y no se lo habían visto. Y ahora que lo sabe, su padre se estaba jugando la vida con la mafia, posiblemente firmando su muerte segura en aquel enfrentamiento. Tanto tiempo cerca de su padre y nunca lo supo. Solo por su bien. Adelaida se levanto. Le daba igual estar embarazada, debía ir a ayudar a su padre. Michelle, conociendo a la niña, la paro. -Se que quieres a tu padre, pero no puedes ir en tu condición. No le gustaria que te arriesgases por el, ni que te arriesgues tu ni la niña.- dijo la pelirroja mirándola a los ojos.

La chica asintio, con lágrimas en los ojos. Estaba nerviosa por como estaría su padre, sus hermanos, sus amigos... . A Michelle le sonó el teléfono, el cual miro y cogió rápidamente. -espera... ¿Hospital?... ¿que coño ha pasado?... Vamos para allá.- dijo cortando. Adelaida miraba atenta a la mujer, con notable miedo en los ojos, Michelle la llevó mientras al coche. -tu padre y tus hermanos están en el hospital. Ha explotado la iglesia, están muy graves.- dijo la pelo zanahoria. Adelaida corrió literalmente al auto, donde se abrocho el cinturón.

Fueron cuestion de segundos el llegar al hospital. Fueron cuestion de segundos el ver los cuerpos heridos de sus familiares. Fueron cuestión de horas de que se produjese un milagro.

Después de seis horas acompañando a los cuerpos de su padre y hermanos, Adelaida rompió aguas de la propia presión, dando comienzo a unas horas intensas de parto...

Holiii que tal? :)

Espero que estéis bien, saludables y no tengais el bicho malo que últimamente da mas fuerte.

Vengo también a decir que este es el ultimo capitulo de la temporada 1 de la historia. Pronto volveré con la segunda temporada.

La segunda temporada estar inspirada en infames, pero con muchas cosas distintas. Como esta temporada, pero ya en infames.

También me gustaría que me dije seis que os parecería un discord donde me podais preguntar cosas o dar ideas o simplemente hablar sobre lo que sea.

Y dicho esto, daros las gracias por leer la historia, agradezco que leáis hasta este párrafo xD

Yo me despido aquí, que mañana empiezo con las clases y si no me voy a dormir me duermo en la mesa.

Adioooos!!!! 💚💚💚