¿QUÉ? ¿NO SOY TU TIPO?©

No me alejaré de ti.

Ya habían pasado doce horas desde que Mixi fue sedada, el reloj marcaba las once con treinta y tres minutos, no me había separado de ella desde que llegué, ya había llamado a mis padres para tenerlos al tanto de la situación, dijeron que vendrían pero yo les negué ya que era mejor que aún no se enteraran de esta situación, los abuelos de 

La mamá de Mixi seguía igual, en estado estable, su padre  me explicó un poco mejor todo ya que yo pensaba que el tumor fue causado por el accidente pero no, yo estaba equivocado, ya lo tenía mucho más antes, el accidente solo fue la pauta para así descubrirlo, pero también con ese incidente todo se agravó.

Tengo mucho sueño pero no quiero dormir, tengo que estar despierto cuando ella también lo haga ya que según lo que dijo el doctor, todo puede pasar y puede darle otra crisis.

Tengo que estar despierto...

MIXI POV

-¿Qué es esto?- me pregunto, estoy parada en medio de un gran bosque, hermosos árboles se elevan a mi alrededor, es...mágico.

-Cielo- alguien me llama, giro mi cabeza hacia la dulce voz y ahí está mamá, más hermosa que nunca, vestida de un elegante vestido blanco, su cara sonrojada, parece un ángel pero está lejos de mí.

-¡Mamá!- exclamo feliz de verla, la saludo con la mano y ella me devuelve el gesto-ven aquí ma'

-No, cariño, ya me llaman- señala un punto ciego detrás de ella.

-No ma' ven conmigo.

-Adiós cielo, cuida a todos por mí, te amo mi niña bella- me da la espalda y camina hacia el hermoso atardecer.

-¡No mamá!- grito corriendo hacia ella pero es tarde, ha desaparecido en la mágica luz.

Y luego todo se vuelve negro.

-¡No!

La oscuridad se aleja y así yo puedo despertar, abro mis ojos poco a poco y enseguida todos mis sentidos se ponen alertas.

¿Dónde estoy?

Recorro el lugar con la mirada.

Un cuarto de hospital.

Muevo mi mano y siento un bulto a lado de esta, giro mi cabeza y veo una mata de cabello castaño, sonrío, es mi novio, tiene la cabeza en medio de los brazos y está apoyado en el filo de la pequeña cama.

Le acaricio el cabello y se remueve complacido por la caricia.

Levanta su cabeza y se sorprende al verme, sonríe un poco y yo le devuelvo el gesto.

-¿Por qué estoy aquí?- pregunto confundida ya que no recuerdo nada, solo que vine con Trish esta mañana al hospital.