Entre garras y otras cosas

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El tiempo se hacía muy lento y Jacob seguía quejándose del dolor. Estaba muy asustada, no porque ahora si podría morir, sino por cono se encontraba mi pobre amigo.

- Jake, todo estará...

-¡No te acerques Laila! -la voz de Sam Me hizo retroceder.

No veía los chicos por ningún lado, hasta que Jacob lanzó un fuerte rugido y escuché como si todos sus huesos se rompían.

Sam inmediatamente me colocó detrás de él y detrás de mi apareció Tyler, sosteniendome de la cintura. Me sentí un Sándwich de lobo.

A los lados y rodeando a un Jacob, ahora convertido en un gran lobo color ladrillo,  aparecieron tres lobos gigantes, uno plateado, un marrón y otro color ceniza.

- Jacob cálmate, todo estará bien. - Habla firme Sam, haciendo que Jacob se encorbe un poco, pero de repente salta a nuestra posición haciendo que yo gritara.

Los lobos se interpusieron en su camino y comenzaron una pelea de perros, así como las que conocemos.

Era evidente que la fuerza de los tres lobos lograban alejar a Jake, pero sus rugidos de dolor, hacía que sintiera pena.

- Ty, lleva a Laila a casa de Emily, ahí nos encontramos luego. -ordena Sam

Tayler me guía al auto y nos vamos rumbo a casa de Emily.

- Lala estás bien?

- Contigo fue igual?

- Si. Todos pasamos por lo mismo.

- Debió doler.

- Y mucho...

Me queje por el dolor de cabeza, no le había prestado atención al golpe que me di con el volante.

-  Lala, estás sangrando. - Me toma la frente con la mano.

- Sólo me golpeé con el volante, no es nada.

Al llegar a casa de Emily, esta y Kim salen corriendo al encuenteo.

- ¿Laila estás bien?. - Pregunta Kim rompiendo el abrazo.

- Tranquila cuñada,  soy un hueso duro de roer.

- Al menos dices chistes.- Me abraza Emily- ¿que te pasó?- Señala mi frente.

- No es nada. - realmente no le daba importancia al golpe.

- Si hay sangre  es algo, vamos a curarte. -Emily me arrastra a la casa.

Emily estaba con un botiquín curando mi frente, cuando por la puerta aparecen los chicos,  Jacob viene con ello.

- ¡¡Jake!!-  Quise ir hacia él pero al levantarme de golpe, me mareé y me volví a sentar.

- ¡Hey! ¿qué te pasa? - Paul corrió a mi lado y me sostuvo.

- Se golpeó con el volante al frenar bruscamente- explicó Tyler.

- No es nada, estoy bien. - insistí

- Lala lo siento...

- No es nada Jake... oigan ya se está haciendo aburrido las disculpas, por cada miembro de la manada. - coloque mis brazos en jarra.

- Yo no te he hecho nada para pedirte disculpa. - acotó  Embry.

- Aún, no me haz hecho nada... Pero con mi experiencia... - Todos me ven con pena. - Es una broma, Dios que susceptibles.

-Jacob, por hoy será mejor que te quedes aquí. Le avisaremos a Billy lo que ocurrió - Dice Sam.

- Es que acaso mi padre...

Al filo de la irrealidad.Where stories live. Discover now